Por INFOVATICANA
El cardenal Burke ha anunciado el lanzamiento de Mensajeros de Nuestra Señora (Our Lady’s Messengers), un nuevo apostolado con sede en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en La Crosse, Wisconsin. Según informó National Catholic Register, el programa busca reunir a los fieles bajo el amparo de la Virgen María, fomentando la oración, la conversión, la reparación y el sostenimiento de la misión evangelizadora del santuario.
El proyecto invita a los fieles a realizar una ofrenda mensual, tanto espiritual como económica, que se integrará a la labor pastoral y catequética del santuario. Según explicó el cardenal Burke, el santuario ha sido por más de 25 años un lugar donde “los corazones se transforman al encontrarse con Cristo a través de María”. Con este nuevo apostolado, busca ampliar esa misión y multiplicar su alcance.
La iniciativa está dirigida a católicos que deseen unirse de manera más estrecha a la vida del santuario y a la misión de la Virgen de Guadalupe, ofreciendo sus oraciones y sacrificios personales en comunión con la obra pastoral que allí se realiza.
Objetivos espirituales y materiales
Burke ha detallado que el programa persigue tres fines fundamentales:
- Unir las oraciones y sacrificios de los fieles con la misión evangelizadora y catequética del santuario.
- Sostener económicamente la infraestructura espiritual y material, garantizando que pueda acoger a peregrinos y crecer en su capacidad pastoral.
- Fomentar la reparación espiritual, para contrarrestar lo que el cardenal identifica como confusión, división y pérdida de fe en la Iglesia y el mundo.
“Ser mensajeros de Nuestra Señora implica una vida de conversión, penitencia y apostolado, no solo una devoción pasiva”
Una respuesta ante la crisis de fe
El cardenal Burke situó este lanzamiento en un contexto de urgencia espiritual. A su juicio, la Iglesia atraviesa un tiempo de grave confusión doctrinal, crisis de fe y divisiones internas, mientras que el mundo se ve dominado por ideologías secularistas y globalistas que buscan marginar la fe cristiana.
Ante esta situación, el cardenal llama a los católicos a volver con decisión a María, pues considera que bajo su guía se encuentra el camino seguro para restaurar la vida de fe y la unidad en la Iglesia. La devoción mariana, afirma, no es un accesorio, sino un instrumento esencial para la conversión y la salvación.
Una invitación del cardenal Burke
Burke concluye invitando a los fieles a ser “uno” con él en la misión de Nuestra Señora de Guadalupe, participando activamente en el apostolado de oración, sacrificio y conversión. “Nuestra Señora nos llama con urgencia; es tiempo de responder con generosidad y fe”, señaló.
Con los Mensajeros de Nuestra Señora, el cardenal pretende que el santuario no sea únicamente un lugar de peregrinación, sino un centro vivo de renovación espiritual en medio de la crisis que atraviesa la Iglesia.