Los ronquidos, las variaciones de temperatura, los ladrones de mantas y las vueltas en la cama suelen hacer que las parejas duerman separadas. Pero esto no es necesariamente malo.
Katy Dartford AP / Euronews
La llamaremos Susan. Lleva ocho años con su novio francés y viven juntos en Suiza. Ambos rondan los cuarenta y hace un año, la pareja empezó a dormir en habitaciones separadas debido a los ronquidos y problemas respiratorios de él.
«Yo ya tenía algunos problemas para conciliar el sueño, pero esto no era realmente un problema con mi pareja. De hecho, desde que lo conocí, las cosas mejoraron mucho», dice Susan.
Sin embargo, él empezó a roncar con más regularidad en 2022. «Me despertaba unas 4 veces por noche con sus ronquidos. También era molesto para él, ya que intentaba moverle para calmar los ronquidos». A principios de 2023, la pareja decidió empezar a dormir separada.
«Fue un alivio poder dormir toda la noche», recuerda Susan. A su novio le diagnosticaron entonces apnea del sueño y empezó a utilizar una máquina CPAP (presión positiva continua en las vías respiratorias).
Intentaron volver a dormir juntos con la máquina encendida, pero el ruido era aún peor que los ronquidos.
Un año después, aunque su estado había mejorado, se enteraron por una aplicación de que seguía roncando, y Susan desarrolló una «paranoia por dormir mal».
Al principio, se trasladaba al sofá cama durante la noche, lo que se convirtió en un «hábito de supervivencia». Finalmente, acordaron turnarse entre la cama y el sofá cama. Sin embargo, cambiar de uno a otro cada semana se ha convertido en algo «bastante agotador», sobre todo teniendo en cuenta el elevado coste de alquilar un piso de dos habitaciones en la ciudad.
‘Divorcio de sueño’ en distintos países de Europa
Los franceses anteponen la salud y la comodidad
En Francia, existe una tendencia e incluso una pasión por el concepto de ‘divorcio del sueño’ para mejorar la calidad del sueño y la felicidad personal.
Según ‘Presse Agence’, esto refleja un cambio social en el que la salud y la comodidad individuales son lo primero, sin sacrificar la relación de pareja.
Lo que antes se consideraba una señal de problemas conyugales es ahora una solución práctica para muchas parejas francesas. El enfoque francés de las relaciones es la independencia dentro de la pareja, lo que encaja con la tendencia a dormir separados.
Los datos del INED (Institut national d’études démographiques) demuestran que muchas parejas francesas pueden mantener una relación íntima y cercana durmiendo separados y acabar teniendo una mejor relación en general.
Escandinavia: Prácticas de sueño progresivas
Los países escandinavos son conocidos por ser progresistas y dar prioridad al bienestar, y también tienen un enfoque único del sueño en las relaciones.
La Fundación del Sueño describe el «método escandinavo del sueño», en el que las parejas utilizan edredones separados y a veces camas separadas para que cada persona pueda dormir lo mejor posible.
Esto refleja un enfoque cultural más amplio sobre el autocuidado y la salud mental, en el que el sueño es una parte importante del bienestar general. En Escandinavia existe la norma cultural de valorar el sueño como parte de la salud. Por eso, dar prioridad a las necesidades individuales de sueño no va en detrimento de la relación, sino que la mejora al estar ambos descansados y menos irritables.
Reino Unido: Opiniones encontradas sobre las camas separadas
En el Reino Unido, las opiniones sobre las camas separadas están divididas. Muchas parejas británicas duermen en camas separadas debido a patrones de sueño diferentes, ronquidos o problemas de comodidad personal, pero sigue habiendo un estigma asociado a ello. Históricamente, las camas separadas se consideraban algo que sólo tenían la aristocracia o la Familia Real, reflejando la visión tradicional de compartir la cama como símbolo de unión y unidad en una relación.
Susan explica que sus amigos suelen ser comprensivos con su forma de dormir, pero a sus padres les cuesta aceptarlo, porque creen que dormir juntos es más importante que dormir de verdad. «Así que ahora se ha convertido en el elefante en la habitación», dice.
Pero en el Reino Unido, las ventajas prácticas de dormir mejor están llevando a más parejas a dormir en camas separadas para aprovechar los beneficios para la salud y el bienestar. Según la escritora Natasha Poliszczuk, el «divorcio del sueño» ha «pasado a la clase media: está al alcance de cualquiera con espacio suficiente».
Dice que las habitaciones separadas «se están convirtiendo en norma en los hogares y matrimonios de la Inglaterra media». Una encuesta reciente realizada a 2.000 adultos en pareja reveló que una de cada seis parejas no comparte cama, prueba de que el divorcio para dormir es cada vez más aceptable.
Famosos que duermen separados
Muchos famosos han optado por el ‘divorcio del sueño’, como la estrella de Hollywood Cameron Diaz, casada con la estrella del rock Benji Madden. La realeza británica tiene una larga tradición de irse a su propia habitación por la noche, mientras que Kourtney Kardashian lo ha llevado al extremo con una casa separada de la de su marido Travis Barker.
Sin embargo, no todos tenemos casas separadas a las que irnos, y según un estudio de la Academia Americana de Medicina del Sueño del año pasado, los hombres suelen irse al sofá o a la habitación de invitados. Y, quizá sorprendentemente, son los ‘millennials’ quienes más lo hacen, en lugar de las personas mayores.
¿Deberías probarlo?
La Dra. Seema Khosla, neumóloga y portavoz de la academia, afirma que dormir lo suficiente, entre siete y ocho horas en el caso de los adultos, es importante para mantener unas relaciones sanas. Los estudios indican que las personas que duermen mal de forma sistemática tienen más probabilidades de sufrir conflictos con sus parejas, explica Khosla.
A pesar de las dificultades, Susan dice que ahora discute menos con su pareja porque «no estamos cansados todo el tiempo» y goza de mejor salud en general. «En realidad se trata de que la gente dé prioridad al sueño», dice Khosla.
He tenido pacientes que llevan casados como 60 años y juran que dormir separados es una razón
Dormir separados «es probablemente más común de lo que pensamos». Lo mismo ocurre con la apnea del sueño, una de las principales causas de los ronquidos fuertes, dice Khosla.
La clave para que los espacios separados para dormir funcionen es hablarlo de antemano. «No se trata de evitar la intimidad. Se trata de reconocer que se puede tener intimidad, que se puede pasar tiempo juntos, pero luego dormir separados. Esa es una parte muy importante de la conversación. Ambos miembros de la pareja tienen que entenderlo y estar de acuerdo«, dice Khosla.
Susan está de acuerdo y aconseja a otras parejas que busquen consejo y consideren «primero el efecto más amplio en su relación». «Organizar vacaciones o viajes en furgoneta, o visitar a amigos y familiares, que solían ser divertidos, son ahora una fuente de estrés debido a los arreglos para dormir», explica.
Cómo hacer un ‘divorcio del sueño’ y no romper la relación en el intento
Si te tienta intentarlo, empieza por hablar de tus problemas de sueño y de cómo afectan a tu vida diaria. Si ambos estáis de acuerdo, probad a dormir separados unas cuantas noches y comprobad si notáis algún cambio en vuestro sueño y estado de ánimo. El divorcio para dormir no es una solución única y lo que funciona para una pareja puede no funcionar para otra.
Y no olvides mantener la intimidad también en otros ámbitos de tu relación. Pasen tiempo juntos antes de acostarse y durante el día. Reevalúen sus hábitos de sueño y estén dispuestos a cambiarlos si es necesario.
También podéis divorciaros para dormir sólo durante la semana, cuando la vida es una locura. Luego dormid en la misma cama los fines de semana, cuando tengáis más tiempo. O prueba el método escandinavo con edredones separados para facilitar el sueño.
La Dra. Phyllis Zee, jefa de medicina del sueño de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern, afirma: «Sería una gran idea hablar de la compatibilidad del sueño antes de casarse«. «Suelo verlo cuando las parejas ya se han casado o llevan algún tiempo juntos y llevan tiempo intentando negociarlo», explica.
Al llegar a la mediana edad, el sueño es menos robusto, según Zee. «En general, se es más propenso a padecer cosas como insomnio o apnea del sueño. Y eso empieza a ser molesto», añade.
Aunque no es ninguna vergüenza dormir separados, Zee afirma que la tecnología ha ayudado a que compartir la cama sea más fácil en algunos aspectos. Las máquinas de ruido blanco, las almohadas y ropa de cama refrescantes, los colchones con doble control de temperatura y las mantas eléctricas de doble control pueden ayudar. «Hay todo un mercado ahí fuera para mitigar algunos de estos problemas», explica.
Ventajas de dormir juntos
Por otro lado, hay estudios que demuestran los beneficios de dormir juntos. Un estudio de 2022 descubrió que las parejas que comparten la cama obtienen más beneficios para la salud física y mental que las que duermen solas.
Investigadores estadounidenses dirigidos por el Dr. Michael Grandner, de la Universidad de Arizona, descubrieron que dormir juntos reduce el riesgo de depresión, ansiedad, estrés y fatiga, y que se sentían más seguros en su relación y felices en general.
Los que dormían pocas veces con su pareja o cónyuge tenían más probabilidades de padecer insomnio que los que compartían la cama con regularidad. Los que dormían solos tenían puntuaciones más altas de depresión, menos apoyo social y menor satisfacción vital y relacional.
Los investigadores concluyeron que dormir en pareja se asocia con un mejor sueño y una mejor salud mental.