Según cifras oficiales, 62 agentes y 19 civiles resultaron heridas en estos disturbios, de los que las autoridades locales aseguran tener «evidencia videográfica».
RT
La Secretaría de Seguridad Ciudadana de Ciudad de México ha asegurado este martes tener «evidencia videográfica» de la infiltración de hombres en las manifestaciones del Día Internacional de la Mujer en la capital mexicana, formando parte de grupos violentos que «agredieron insistentemente a las mujeres policías con varillas y martillos» y cometieron otros actos vandálicos.
Según detalla el organismo oficial en una publicación de Twitter, también «se registró la participación de un hombre embozado», que habría participado en la vandalización de algunos locales de la ciudad.
Por su parte, la subsecretaria de Desarrollo Institucional, Marcela Figueroa, confirmó que «a lo largo de la manifestación se identificaron hombres infiltrados que agredieron al personal policial femenino que se encontraba en resguardo de la manifestación», y en conferencia de prensa reiteró que fueron precisamente esos hombres los que encabezaron las agresiones, que han dejado un saldo de 62 funcionarias y 19 civiles heridas.
«19 policías y una civil requirieron hospitalización. Por fortuna, están todas estables«, precisó a continuación Figueroa, que detalló que tres de las heridas necesitaron collarín, otras tres se encuentran «con los brazos inmovilizados» y dos se han quedado «sin poder caminar por las lesiones». «Ninguna requirió permanecer hospitalizada y todas seguirán tratamiento médico en sus domicilios», agregó.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana de la capital precisó en un mensaje posterior a los hechos denunciados que «las mujeres policías que participaron en la marcha no portan ningún tipo de armas, ni de fuego ni de balas de goma, gases o químicos», y que «únicamente utilizan equipo de protección personal, como medida de contención».
Sin embargo, las manifestaciones por el Día Internacional de la Mujer en la capital de México, en cuyo centro histórico se movilizaron cientos de mujeres para denunciar la violencia de género que azota al país latinoamericano, estuvieron en todo caso marcadas por los disturbios y por la dureza con la que la Policía reprimió a las manifestantes, a las que sí arrojaron gas lacrimógeno según se acercaban al Palacio Nacional.