Alejandro Armenta, gobernador electo, refirió que analizará no sólo la situación del Museo Barroco, sino de todos los Proyectos de Prestación de Servicios (PPS) y de Asociación Público-Privada (APP).
Claudia Aguilar / Intolerancia Diario
La administración de Sergio Salomón Céspedes dejará un informe sobre la situación financiera del Museo Internacional Barroco (MIB), con la finalidad de que el gobierno entrante tenga claridad sobre los pasivos que tiene esta obra.
En tanto, el gobernador entrante, Alejandro Armenta Mier comentó que con este documento podrá saber a cuánto asciende la deuda por el MIB y en general la del estado de Puebla, y con ello tomar las decisiones más adecuadas.
Tras participar ambos mandatarios en los Foros Nacionales de los Tribunales de Justicia Local, el gobernador actual comentó que se entregará toda la información con la que cuenta la administración estatal, sin esconder ningún detalle.
“Nosotros se lo pondremos en el escritorio y ya Alejandro Armenta hará el mejor análisis y las decisiones que considere sobre lo que se tenga que hacer”, declaró en entrevista.
Por su parte, Alejandro Armenta refirió que analizará no sólo la situación del Museo Barroco, sino de todos los Proyectos de Prestación de Servicios (PPS) y de Asociación Público-Privada (APP), con el objetivo de conocer a profundidad las condiciones de la deuda de Puebla y porque es fundamental para el ejercicio del gasto y la proyección financiera a largo plazo.
“La deuda siempre puede entrar en un proceso de reestructuración, los procesos financieros siempre pueden analizarse, vamos a revisarlo con mucha responsabilidad, yo no podría adelantar ahorita porque es un asunto de ambas partes”, refirió.
En ese sentido, el morenista ofreció trabajar para construir mejores condiciones financieras para la entidad.
Pasivos en Museo Barroco, CIS y Audi
El Museo Internacional del Barroco (MIB), el Centro Integral de Servicios (CIS) y las plataformas Audi, fueron proyectos gestados durante el sexenio del panista Rafael Morena Valle Rosas y que se financiaron por medio de los esquemas Proyectos de Prestación de Servicios (PPS), y de Asociación Público-Privada (APP).
Las tres obras representaron una inversión superior a los 8 mil millones de pesos a pagar en plazos de entre 25 y 30 años.