Los servicios de rescate siguen tratando de localizar horas después los restos de la aeronave siniestrada, en la que también viajaba el ministro de Exteriores
Raisi, un turbante negro con un oscuro pasado
MARÍA CARBAJO / ABC
El helicóptero del presidente de Irán, Ebrahim Raisi, ha sufrido este domingo un accidente tras verse obligado a realizar un aterrizaje forzoso por las malas condiciones de visibilidad provocadas por una intensa niebla, confirmó a Reuters una fuente gubernamental.
La misma fuente asegura que «la información escasa que llega es preocupante» y temen que la vida del presidente esté «en riesgo».
Hasta 40 dotaciones de los servicios de rescate se han movilizado para el siniestro, aunque se desconoce la ubicación exacta de la aeronave.
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Pese a la confusión inicial sobre la presencia o no del mandatario, el ministro del Interior iraní, Ahmad Vahidi, confirmó que este sí se encontraba a bordo.
La IRNA (‘Agencia nacional de la república islámica’), afirmó que, además del presidente, entre los ocupantes de la aeronave, se encontraban Hojjat al-Islam al-Hashim, el imán de Tabriz Friday, Hossein Amirabdollahian, ministro de Asuntos Exteriores y Malik Rahmati, gobernador de Azerbaiyán Oriental, entre otros pasajeros.
Pese a la rápida movilización de los servicios de rescate, la IRNA informa de que la niebla está impidiendo dar con la ubicación exacta del helicóptero, algo que ha confirmado el propio titular de Interior: «Hay que tener en cuenta que la zona ahora mismo es complicada y es dificil establecer comunicación», ha dicho.
El jefe de gabinete del ejército iraní ha ordenado que se destinen todos los efectivos posibles para participar en las tareas de localización y rescate.
Las autoridades iraníes creen que la aeronave, que formaba parte de un convoy de tres, se encuentra en el bosque de Dizmar, cerca de la ciudad de Varzaghan., una zona boscosa a unos 30 kilómetros de la frontera con Azerbaiyán, donde el mandatario y su comitiva habían participado antes en la inauguración de una presa, acompañando al presidente azerí, Ilham Aliyev.
La agencia semioficial del país Fars News ha pedido a la población que rece por el presidente.
Jamenei pide tranquilidad
Por su parte, el guía supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, instó a los iraníes a «no preocuparse» por el país mientras prosigue la búsqueda.
«El pueblo iraní no debe preocuparse, no habrá ninguna perturbación» en el país, afirmó Jamenei, quien dijo esperar «que Dios devuelva al presidente y a sus compañeros a los brazos de la nación», durante un discurso retransmitido por la televisión estatal. Sin embargo, fuentes no oficiales tanto de Irán como de Israel, objeto de un ataque iraní hace unas semanas, lo dan al mandatario por muerto.
De entre las primeras reacciones internacionales destaca la del Departamento de Estado de Estados Unidos, que asegura estar «observando todas las informaciones»: «No vamos a hacer más comentarios en este momento», han indicado en un comunciado.
Raisi, de 63 años, clérigo ultraconservador y anterior jefe del poder judicial, alcanzó la presidencia en 2021 con el 61,95% de los votos.