Mercado como contrapeso, riesgo de perder grado de inversión y nearshoring, características de México en la encrucijada, dice en entrevista
Yolanda Morales / El Economista
Las reformas para modificar al poder judicial y desaparecer los órganos autónomos, van en un sentido opuesto de lo que necesitaríamos para aprovechar la oportunidad que representa el nearshoring, porque generan incertidumbre, advirtió el ex miembro de la Junta de Gobierno de Banco de México, Javier Guzmán Calafel.
“Pero no es el único problema. Porque no se desestimula nada más a la Inversión Extranjera Directa. También se desestimula a la inversión nacional. Porque en un marco jurídico donde las reglas del juego no están claras, pues obviamente las inversiones se vuelven más cautelosas”, señaló.
Javier Guzmán se encuentra en una gira para presentar el libro del que ha sido coordinador de 11 autores: México en la Encrucijada, que tiene el objetivo de ayudar en la agenda económica de los próximos años y dar al público elementos para que estén mejor enterados de los principales retos económicos de México y la forma de superarlos.
Entrevistado por El Economista, accede a hacer un acercamiento sobre el marco institucional y marco legal que forma parte de uno de los cuatro grandes bloques en los que se divide el libro, donde destaca la pluma y experiencia del autor José Ramón Cossío, ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia.
Cuando José Ramón Cossío habla de la perspectiva sobre la falta del estado de derecho, dice que hay pocos elementos para pensar que va a mejorar en el corto plazo, refirió.
“El interés principal del poder, que se ha acentuado de manera dramática ahora con estas reformas, es mantener y fortalecer ese poder. En el capítulo (del libro) desglosa de manera detalladísima dónde están los problemas con las limitantes de la falta de estado de derecho en México a lo largo de los años”.
El ex banquero central observó que aún sin estas reformas, ya era de esperarse el deterioro del estado de derecho. “El objetivo, aún desde antes de estas reformas, ha sido mantener el poder y fortalecerlo, no crear un marco jurídico sólido.”
Mercado, contrapeso para proteger autonomía
Guzmán Calafel fue subgobernador de Banco de México entre el 2013 y el año 2020, así que en la conversación, argumenta también sobre su experiencia en el banco central.
Reconoció que la volatilidad experimentada por el peso mexicano desde junio a la fecha, donde el peso ha perdido 17% frente al dólar, es una muestra del mercado operando como contrapeso a las decisiones internas del país.
México es una economía muy abierta al movimiento de los capitales. La mayoría de las operaciones del mercado cambiario se realizan fuera de México y ni siquiera se ven aquí., relató. Al momento que las autoridades toman decisiones que pueden afectar las decisiones de los inversionistas, se ve reflejado en una serie de variables.
Por ello señaló que “sería peligrosísimo poner en duda la autonomía del Banco de México. En ese tema, no habrá ningún tipo de tolerancia porque tocaría puntos de alto impacto para el mercado”.
Ahí sí reaccionaría el mercado de manera mucho más violenta de lo que hemos visto hasta ahora, sentenció.
Yo diría que hay grados de sensibilidad del mercado a distitnos tipos de acciones y en algunas puede ser más virulenta si ven una amenaza más cercana a las funciones. Y una amenaza mayor, sería atentar contra la autonomía del banco central.
Déficit fiscal pone en riesgo Grado de inversión
El problema más urgente que tiene la economía era corregir las finanzas públicas de corto plazo. Un déficit fiscal de 6% del PIB, deja a las finanzas públicas sumamente apretadas en un contexto de cambio de gobierno y desaceleración económica, advirtió.
Explicó que las principales calificadoras, las tres de referencia mundial, podrían recortar la calificación soberana de México, asumiendo la dificultad que enfrenta el país para llevar al déficit a 3 por ciento como se comprometió el gobierno.
Complican la situación económica y política del país. Evidentemente los problemas más relevantes son las reformas constitucionales, la reforma judicial y la propuesta de desaparecer todos los organismos autónomos. Porque agravan el del marco institucional y el estado de derecho que por años ha prevalecido en México, señaló.
“Fitch, es donde tiene México la calificación más riesgosa, al borde de perder el Grado de inversión. Y las reformas definitivamente no ayudan. Perjudican. Y eso lo están diciendo ellas mismas”.
Advierte como “un gran acierto” la permanencia de Rogelio Ramírez de la O en la secretaría de Hacienda “Es muy bueno que se quede el secreario porque él manejó el programa fiscal cuando aumentó el déficit y es muy responsable de su parte, quedarse a corregirlo”.
Pero considera que será muy difícil que la nueva administración cumpla el compromiso de bajar el déficit a 3% del PIB, tan pronto como el año entrante, aún con Ramírez de la O en la oficina de Hacienda.
Una economía más débil, que en mi opinión podría caer en recesión, que además recibirá un apretón fiscal fuerte para corregir el déficit, donde no se podrá detener el gasto en los proyectos emblemáticos, porque no se han terminado, no es un contexto favorecedor para reducir el déficit.
Nearshoring, ventana que puede cerrarse
Guzmán Calafel es economista egresado de la UNAM y cuenta con Maestría por las Universidad de Lovaina y Yale, reconoce que el nearshoring es una oportunidad extraordinaria para México. Pero afirma que no es exclusiva para el país y no estará abierta permanentemente.
“Habrá un momento en que, las empresas se relocalizaron, las cadenas productivas ya se establecieron y el asunto del nearshoring, se acabó. El efecto es de largo plazo porque ahí se quedan las inversiones, pero la ventana de oportunidad no estará abierta de manera permanente”.
Tomó los resultados de las diversas encuestas que aplica Banxico sobre las expectativas de especialistas del sector privado y empresas y comienza a enumerar los principales obstáculos que limitan la posibilidad de crecer. Obstáculos que refiere también como factores que pueden acotar la posibilidad de que el país se beneficie de esta relocalización.
“Las limitantes más importantes que mencionan las empresas son el acceso a suficiente electricidad, agua, gas, seguridad y Estado de derecho. Ninguna de estas condiciones se ha cumplido ahorita y en un entorno en el que además se introduce una serie de reformas que somete a cuestionamientos adicionales al estado de derecho, evidentemente los incentivos para que la inversión venga hacia México se deterioran”.
Los requisitos que más preocupan para el nearshoring, son infraestructura, conectividad, mejorar el capital humano, un desarrollo tecnológico más acelerado. Pero el tema de todo es que se trata de elementos que México necesitan con o sin nearshoring.
El nearshoring, es tocado en el libro al menos en tres capítulos, los escritos por el ex representante de Banco Mundial en México, Mark Thomas; por el ex responsable de las negociaciones regionales y multilaterales de la Organización Mundial de Comercio, Luis de la Calle, y por el economista en jefe para México y América Latina de Bank of America Securies, Carlos Capistrán.
Fuente: El Economista