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NUEVA YORK, 30 ene (Reuters) – Chita Rivera, la leyenda del teatro musical y ganadora de múltiples premios Tony que creó el papel de la agitadora puertorriqueña Anita en Broadway en “West Side Story” y otros personajes memorables, murió a la edad de 91 años.
La pequeña bailarina, cantante y actriz de cabello negro azabache hizo historia cuando se convirtió en la primera mujer hispana en recibir el prestigioso Honor del Centro Kennedy en 2002. También recibió la Medalla Presidencial de la Libertad de manos del presidente Barack Obama en 2009.
“Con gran tristeza Lisa Mordente, la hija de Chita Rivera, anuncia el fallecimiento de su amada madre quien falleció pacíficamente el martes 30 de enero de 2024 en Nueva York luego de una breve enfermedad”, dijo su hija Lisa en un comunicado.
Rivera fue nominado a 10 premios Tony y ganó dos veces. También recibió un Tony especial por su trayectoria en 2018 por una carrera que abarcó casi siete décadas.
El célebre dramaturgo Terrence McNally, que escribió el libro de los papeles de Rivera ganadores del Tony en “The Rink” junto a Liza Minnelli en 1984 y “Kiss of the Spider Woman” una década después, la describió como “un libro de historia ambulante de la edad de oro de Teatro musical americano.
“Desde el coro de los musicales de Broadway de los años cincuenta “Guys and Dolls” y “Can-Can”, Rivera pasó al centro del escenario como la asesina Velma Kelly en la producción original de Broadway de 1975 de “Chicago” y creó el papel de Rose en el éxito sorpresa “Bye , Bye Birdie” con Dick Van Dyke en 1960.
Pero fue su interpretación de la atrevida Anita, que balancea sus caderas, paseándose por el escenario cantando “America” o advirtiendo a su amiga sobre “A Boy Like That” en “West Side Story” lo que convirtió a Rivera en una estrella.
“Estar allí cuando esos genios crearon ese espectáculo fue algo que es una bendición, ya sabes. Es algo que nunca, jamás podrás olvidar”, dijo una vez Rivera sobre el innovador musical de Leonard Bernstein y Stephen Sondheim.
NADIE COMO CHITA
“Cuando soltó esas extremidades, era una mujer espectacular y todos los coreógrafos la querían”, dijo una vez el galardonado productor y director Harold Prince. “No hay nadie que pueda bailar, cantar y actuar como Chita Rivera”.
Rivera nació como Dolores Conchita Figueroa del Rivero el 23 de enero de 1933 en Washington, DC. Su padre, el músico puertorriqueño Pedro Julio Figueroa del Rivero, murió cuando ella tenía 7 años.
Una de cinco hijos, estudió ballet desde muy joven y ganó una beca para la Escuela de Ballet Americano de George Balanchine en Nueva York. Todavía era una adolescente cuando, por capricho, audicionó con un amigo para la compañía de gira del musical “Call Me Madam” y consiguió un papel.
“Siempre les digo a los niños de hoy que nunca menosprecien al coro y trabajen allí”, dijo Rivera en una entrevista con el sitio web thestage.co.uk en 2015. “Es un lugar extraordinario para estar: aprenderás todo lo que eventualmente tendrás”. hacer.
“En 1957 se casó con Tony Mordente, actor y bailarín del espectáculo. Ella era una parte tan integral de “West Side Story” que su producción en Londres tuvo que retrasarse hasta después de que ella dio a luz a su única hija, Lisa, en 1958.
La carrera de Rivera se vio interrumpida en 1986 cuando sufrió una fractura compuesta de pierna en un accidente automovilístico en Nueva York mientras aparecía en “Jerry’s Girls”. Los médicos tuvieron que insertar muchos clavos para reparar su miembro destrozado.
“Al igual que en las películas, me dijeron que nunca volvería a bailar”, dijo a Variety en 2005. “Y al igual que en las películas, aquí estoy, no sé cuántas presentaciones después”.
REBOTE
Después de una rigurosa fisioterapia, Rivera no sólo se recuperó del accidente sino que ganó su segundo Tony por “El beso de la mujer araña” en 1993 y obtuvo otra nominación por “Nine”, junto a Antonio Banderas, una década después.
Rivera también apareció regularmente en programas de entretenimiento televisivo y estuvo en la versión cinematográfica de “Sweet Charity” en 1969 con Shirley MacLaine y “Chicago” en 2002.
A mediados de sus 70 años, cuando otros bailarines habían disminuido su ritmo o se habían retirado, ella protagonizó “Chita Rivera: The Dancer’s Life”, un espectáculo que combinaba música, danza y narración de historias.
“Este auténtico icono de Broadway… parece tan en forma como un violín bien afinado”, dijo la revista Time Out en su reseña del espectáculo de 2005.
Una década más tarde, Rivera apareció en una retrospectiva televisiva de su carrera en la televisión PBS llamada “Chita Rivera: A Lot of Livin’ To Do”. El mismo año obtuvo su décima nominación al Tony como una millonaria en busca de venganza en el musical “The Visit”. Fue la última de varias colaboraciones con el equipo de compositores de John Kander y Fred Webb.
“Realmente nunca sabes lo que te depara el día siguiente”, dijo Rivera al grupo de defensa de personas mayores AARP en una entrevista de 2011. “Tengo una perspectiva muy joven. No creo que sepas cuánto puedes hacer hasta que lo intentas”.
Información de Patricia Reaney Información adicional de Jasper Ward Edición de Bill Trott y Rosalba O’Brien
Fuente: https://www.reuters.com/world/us/chita-rivera-west-side-story-broadway-star-dead-91-2024-01-30/