Por Itandehui Rodríguez Martínez
@Itandehui_RoMa
Sí, son datos de 2021, evidentemente debe haber un incremento en el número total de vehículos que circulan en Puebla, pero en ese año, el INEGI registró que en nuestro hermoso estado había 1,209,348 unidades recorriendo las calles y carreteras poblanas. Sin duda la verificación de todos estos ese el más grande reto de la administración de Sergio Salomón Céspedes Peregrina.
En Puebla tenemos un problema que venimos arrastrando de años y que no había manera de arreglar en un par de meses. Es más, les puedo apostar que la prórroga para verificar, tendrá que ampliarse en varias ocasiones. Numéricamente es imposible que en 30 días logremos la meta, como en el Teletón. Y es que hay 16 centros de verificación para atender a este universo de vehículos.
En marzo habían verificado 293 mil vehículos, para mayo, 340 mil, esto quiere decir que, bimestralmente, pueden verificar más o menos unos 50 mil vehículos. Supongamos que cada verificentro pudiera revisar a 150 vehículos diariamente, considerando que en el estado hay 16 y si tomamos en cuenta meses de 30 días, entonces mensualmente se podrían verificar a 72 mil autos.
Pero tenemos un universo de 1 millón 200 mil autos, es decir, se requeriría de años de 16 meses para que todos pudiéramos pasar por un centro de verificación. Eso sin considerar que se tiene que verificar dos veces por año.
Además, hay otro pequeño detalle y es que, muchos usuarios no están acudiendo a cumplir con su obligación no por falta de ganas, sino por falta de recursos.
Hay muchas variables que deben ser consideradas por las autoridades antes de empezar a multar a los contribuyentes.
¿Cuáles?
Por ejemplo, el uso de los vehículos. Hay una gran cantidad de campesinos que tienen unidades que ni yendo a bailar a Chalma pasarían por las pruebas. Dejarlos sin sus vehículos implica ahorcarlos y dejarlos sin ingresos.
Renovar las unidades del transporte público ha sido el gran sueño de Puebla. Hemos escuchado administración tras administración que se generarán las condiciones para lograrlo, pero hay camiones circulando que estaban en exhibición en las concesionarias cuando yo estaba en la secundaria.
Soy la primera en agradecer que se tomen estas medidas en favor del medio ambiente. Ya les he dicho que no soy una mujer normal y que padezco de una serie de fobias. Además muchas cosas me producen ansiedad, entre ellas las repercusiones del cambio climático.
Mucho dependerá de la buena voluntad de los dueños de vehículos en Puebla, porque nos encanta dejar todo para la última hora.
Pero, además, urge la apertura de más verificentros, por lo menos el doble, que permitan aspirar a acariciar la meta en los tiempos adecuados.