La actriz malaya Michelle Yeoh hace historia al convertirse en la primera mujer de origen asiático nominada a Mejor Actriz en los Premios Oscar a los 60 años
LUCAS DE LA CAL / Shanghai / EL MUNDO
Quién. La actriz Michelle Yeoh debutó en el cine en los años 80. Su primer perfil fue un anuncio con el actor Jackie Chan.
Qué. A los 60 años, se ha convertido en la primera mujer de origen asiático en ser nominada como Mejor Actriz en los Premios Oscar.
Por qué. Michelle ha aprovechado la nominación para reivindicar a las actrices asiáticas y desear que tengan un mayor reconocimiento en la industria de Hollywood.
Hubo una vez que Michelle Yeoh adoptó el nombre artístico de Michelle Khan. A su agencia de representación le sonaba más comercial. Fue a mediados de la década de 1980, cuando debutó en la pantalla grande protagonizando películas hongkonesas de artes marciales. Atrás había dejado a la chica de 20 años coronada Miss Malasia con una prometedora carrera como bailarina de ballet. Incluso había estado en Londres formándose en una prestigiosa academia de danza. Una lesión de espalda la apartó del baile. Pero apenas tuvo tiempo para deprimirse porque un cazatalentos de Hong Kong la reclutó para protagonizar un anuncio de relojes con el actor Jackie Chan.
Michelle se convirtió rápidamente en uno de los grandes rostros del cine de aquella era dorada de las últimas dos décadas del siglo pasado en la ex colonia británica, cuando Hong Kong era una ciudad libre e indomable. Hoy, a sus 60 años y con el apellido Yeoh de vuelta, Michelle se ha convertido en la primera intérprete de presumida ascendencia asiática en estar nominada como mejor actriz en los Oscar 2023 por su papel principal en Todo a la vez en todas partes, que arrasó con 11 nominaciones, incluida la de mejor película, cuando el martes se anunciaron las candidaturas. A principios de enero, esta malaya que también tiene sangre cantonesa, del sur de China, ganó su primer Globo de Oro.
«Ha habido increíbles actrices asiáticas que nunca han estado nominadas. Espero que esto rompa ese maldito techo de cristal, que esto continúe y que veamos nuestras caras más veces en estos premios», dijo la actriz tras conocer una nominación que quiso dedicar a las víctimas del tiroteo en Monterey Park durante las celebraciones por el Año Nuevo Lunar.
La hija de un reconocido abogado y una ama de casa de Malasia, virtuosa del piano y campeona de squash en el instituto, al fin ha dado el paso triunfal que le faltaba en su larga carrera: sentarse en la primera fila de Hollywood, demostrando además que nunca es tarde para lograrlo. En su vida privada, mantiene una relación desde 2004 con el francés Jean Todt, de 76 años, quien fue el mandamás de la Fórmula 1 y director de Ferrari durante la época gloriosa de Michael Schumacher.
Echando un vistazo a su pasado, poco antes de cumplir los 30, Michelle tuvo un retiro de tres años cuando se casó con el magnate hongkonés Dickson Poon. Se divorció y decidió volver a los cines, compartiendo de nuevo cámara con Jackie Chan. Su buen hacer en las películas de acción en mandarín y en cantonés que siguió protagonizando hizo que llegara la primera llamada de la meca de la industria cinematográfica: fue la chica Bond junto a Pierce Brosnan en El mañana nunca muere (1997), convirtiéndose también en la primera protagonista femenina asiática de la franquicia.
Su carrera en la lengua de Shakespeare continuó con grandes éxitos como Memorias de una geisha y Sunshine, mientras que en 2015 se pasó a la televisión haciendo de agente doble en la serie de acción Strike Back y más recientemente se ha unido al universo Star Trek. Ahora que está en lo más alto, todavía le queda cuerda interpretativa para rato en grandes proyectos como las próximas dos películas de Avatar, previstas para 2024 y 2026.
Fuente: https://www.elmundo.es/internacional/2023/01/26/63d13895fdddff125d8b4584.html