Sheinbaum, Xóchitl y Máynez eligieron el aniversario de la expropiación petrolera para hablar de su plan energético, incluido el futuro de Pemex, CFE y su visión sobre las energías renovables.
Cristóbal Martínez / Animal Político
En la tumba del general Lázaro Cárdenas, quien realizó la expropiación petrolera en 1938, la candidata oficialista Claudia Sheinbaum propuso fortalecer Pemex y CFE, mientras que desde un parque eólico, su adversaria Xóchitl Gálvez presentó su plan basado en la transición a energías renovables como eje y volver a subastas de energía limpia para comprarla barata sin importar quién la produzca.
En tanto, Jorge Álvarez Máynez, aspirante presidencial de MC, escogió el Monumento a Lázaro Cárdenas en la alcaldía Cuauhtémoc para insistir en sus propuestas de cerrar refinerías y transitar hacia las energías limpias y renovables.
Los tres eligieron una fecha emblemática en las efemérides nacionales: 18 de marzo, día en que se conmemora el decreto de expropiación petrolera de Lázaro Cárdenas en 1938, que este lunes cumplió 86 años de ocurrido.
Si bien, los presidenciables incluyen en sus planes generales temas como energías renovables, transición energética y el futuro de Pemex y CFE, —ambas empresas productivas del estado de energía petrolera y eléctrica respectivamente—, en sus propuestas se esbozan algunas diferencias, aunque faltan por conocer más detalles y cómo van a llevarlas a cabo.
¿Qué proponen los presidenciables para Pemex y CFE?
Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) son empresas clave en manos del Estado para conocer la visión energética de un futuro gobierno, y en esta campaña no es la excepción.
Sheinbaum propone fortalecer Pemex a través de un proceso de consolidación en su función principal, es decir, los hidrocarburos.
“Se trata de consolidarlo con su función principal, pero avanzar en el combate de la situación actual del cambio climático”, dijo Sheinbaum, sin embargo, la función principal de Pemex no son las energías renovables.
“Contribuir a la seguridad energética mediante la producción, procesamiento, distribución y comercialización de hidrocarburos y sus derivados con criterios de rentabilidad y sostenibilidad, en beneficio del desarrollo nacional”, dice el Plan de Negocios de Pemex para el lapso 2023-2027, que abarcaría la primera mitad del próximo sexenio.
En otras palabras, Pemex produce petróleo, lo procesa y lo distribuye junto con sus derivados, como gasolinas.
La morenista presentó su plan energético acompañada de los descendientes directos de Lázaro Cárdenas: su hijo Cuauhtémoc Cárdenas -excandidato presidencial y exjefe de Gobierno de CDMX y exgobernador de Michoacán- y el nieto Lázaro Cárdenas Batel, también exmandatario de Michoacán y recientemente fue coordinador de asesores de Andrés Manuel López Obrador.
En contraste, Xóchitl Gálvez también busca fortalecer Pemex, pero sólo en un rubro, que a su juicio, es su fortaleza y donde sí genera dinero: la exploración para buscar más petróleo y comercializarlo.
Gálvez no abandera que Pemex refine petróleo para producir gasolinas, incluso ha propuesto el cierre de dos refinerías por contaminantes y porque no apuesta al negocio de fabricar gasolina en el país.
“Por supuesto que el petróleo va a seguir siendo un bien útil durante muchos años, no tanto para producir energía, sino para la industria petroquímica, por un tiempo (en) gasolinas”, dijo Gálvez.
“Solo estamos refinando el 30 por ciento, porque el 70 por ciento lo estamos importando y lo estamos haciendo con pérdidas mega millonarias”, aseguró.
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Sus palabras se escucharon desde Campeche, donde fue hallado el más reciente gran yacimiento de petróleo en México (Cantarell).
E insistió en dejar atrás el pasado para Pemex y adaptarlo a las necesidades de los nuevos tiempos.
“Es hora de actualizar y modernizar a nuestro querido Pemex. Los tiempos cambian”.
“Por ahí le vamos a apostar. Vamos a regresar a la exploración para que Pemex sea una empresa totalmente viable”.
Incluso, días atrás, Gálvez propuso modernizar Pemex hasta en el nombre y llamarlo Emex (Empresas Mexicanas) para enfatizar que le asignaría más funciones más allá del productor de petróleo.
Así, Emex produciría también electricidad a través de la geotermia —energía derivada del calor de la Tierra—, y la cogeneración —el sistema que genera calor y energía de una misma fuente.
Sin embargo, por temas administrativos, el equipo de Gálvez optaría por dejar el nombre en Pemex y añadirle esas nuevas misiones.
Aunque Sheinbaum también esbozó otras tareas que asignaría a Pemex: participar en la explotación de litio y la producción de energía térmica, eléctrica “e incluso con fuentes renovables”.
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El litio es un elemento metálico que se usa principalmente en la industria tecnológica para fabricar baterías de celulares, computadoras y hasta en autos eléctricos. En Sonora se encuentra el yacimiento de litio más grande de este metal.
Aunque para lo relacionado con este metal, el gobierno de López Obrador creó por decreto en 2022 la empresa estatal Litio para México, para la exploración, explotación y producción de este mineral.
Mientras que Jorge Álvarez Máynez propuso la modernización de Pemex para que sea administrada como una empresa.
CFE y las propuestas de las presidenciables
La otra empresa clave en la administración pública es la Comisión Federal de Electricidad, actualmente a cargo del expriista Manuel Bartlett.
Para CFE, Sheinbaum también plantea fortalecerla como una empresa pública en beneficio del desarrollo nacional.
Sobre la CFE, una de las polémicas sobre su misión es qué tanto se deja o no entrar a la iniciativa privada en el sector eléctrico.
Sheinbaum, como AMLO, deja claro que CFE tiene que ser la empresa mayoritaria en el sector eléctrico.
Así la exjefa de gobierno de CDMX propone que CFE garantizará la capacidad de transmisión y distribución de energía.
Además, CFE mantendrá su participación en la generación eléctrica en al menos 54% y en el sector privado será de 46% o menos.
Por el contrario, Xóchitl Gálvez muestra mayor apertura en la participación privada en la energía eléctrica. Por ejemplo, con las subastas eléctricas.
“Vamos a ir, obviamente con las empresas públicas, en el caso de Pemex lo que genera dinero es la exploración y en el caso de CFE lo que genera dinero es la transmisión. Donde pierde dinero es en la generación”.
El 8 de marzo, en un foro de Citibanamex, Gálvez se pronunció por volver a las subastas de energía eléctrica abiertas a empresas particulares, que suspendió el gobierno de López Obrador.
“La energía debe ser limpia y barata, no me importa quién la produzca, si la genera el CFE, qué bueno, se la compramos y si no, quien la produzca”, dijo.
De quién es la energía
Otro de los ángulos en temas de energía que salen a relucir en campaña es de quién es la energía, por ejemplo, el petróleo.
Cada uno de los candidatos respondió que de los mexicanos, pero en la forma de enunciarlo hay matices.
Sheinbaum utiliza conceptos que se han escuchado en Obrador: soberanía energética. Para la morenista México debe contar con suministros propios de energía, depender poco de las importaciones y mantener fuertes y sanas a Pemex y CFE.
Gálvez dijo literalmente que “el petróleo es de todos los mexicanos”. Su propuesta es, dijo, basarse en lo que permita la Constitución en materia de energía y la relación de la iniciativa privada en este sector.
“La Constitución es clara, que no quede ninguna duda, el petróleo es de todos los mexicanos. Para mí, la ley, si es la ley, en mi gobierno se respetará la Constitución y las leyes secundarias que regulan a Pemex y la industria petrolera, así como la industria energética”.
“Puede haber una participación privada, honesta, transparente. Yo no sé por qué el gobierno piensa que trabajar con el sector privado significa corrupción. Inversión privada en Pemex, de acuerdo a lo que marca la Constitución, inversión privada en CFE, de acuerdo a las subastas eléctricas”.
¿Qué planes tienen para las energías renovables las candidatas presidenciales?
Pasando la página a Pemex, las candidatas presidenciales prevén en sus proyectos un lugar para las energías renovables, aunque al menos en lo expresado este lunes la diferencia estuvo en la velocidad con la que se haría una transición hacia ese uso de energías llamadas limpias.
Sheinbaum mencionó el impulso a la transición en energías renovables mediante ejemplo que van desde “fomentar” la distribución y promoción de paneles solares en los techos de las viviendas hasta poner un tope a la producción de petróleo en 1.8 millones de barriles diarios y que las fuentes renovables absorban el el aumento en la demanda de energía.
Otro de sus conceptos clave en su plan es el de eficiencia energética que consiste en que el consumo de energía no crezca a la misma velocidad que el económico.
Por su parte, Xóchitl Gálvez puso fecha a la transición a energías renovables en México: en cinco años esto debería ocurrir, es decir, todavía dentro de su sexenio si fuera elegida presidenta el próximo 2 de junio.
La candidata postulada por el PAN, PRI y PRD criticó que AMLO prevé que la transición a renovables tomaría 30 años.
En medio de esa transición, Gálvez propuso capacitación y apoyos a los trabajadores para adaptarse a la nueva forma energética.
“La transición energética ya está y tenemos dos caminos como país: nos subimos al tren del desarrollo o nos quedamos fuera”, sostuvo.
Gálvez se definió como la candidata que es “la ley de energías renovables” y llamó a Sheinbaum “la ley combustóleo”, de acuerdo con un comunicado.
“Me queda claro que tenemos que hacer una transición justa. No podemos decir de la noche a la mañana que los combustibles fósiles ya no se van a usar”, sostuvo.
La panista también mencionó acciones concretas como poner paneles: dar cinco millones de créditos para la instalación de celdas solares en todo el país.
Por su parte, Máynez dijo que invertiría en energía eólica y solar, sin precisar un monto concreto.
“Ya quisiera cualquier país europeo tener el potencial que tenemos en materia de energía solar, por ejemplo, en Sonora, el potencial que tenemos en energía eólica”, remarcó.
En ese sentido, Movimiento Ciudadano plantea una sustitución gradual de los ingresos derivados de la producción de petróleo, a cargo de Petróleos Mexicanos (Pemex), y gas por fuentes como el litio, la energía eólica, solar e hidráulica.
Por ello, se plantea crear una colaboración entre inversión privada y pública en Oaxaca, Zacatecas, Tamaulipas y Yucatán para el desarrollo de energías limpias.
Acciones concretas en energía para los ciudadanos
Entre las propuestas de las candidatas presidenciales esbozaron algunas que tienen impacto directo en la vida cotidiana de las personas, más allá de las grandes empresas o los mercados energéticos.
Por ejemplo, Sheinbaum aseguró que no habrá aumentos en términos reales en la gasolina diésel ni en tarifas eléctricas. Gálvez propuso comprar energías baratas sin importar si es a privados o no.
La morenista sugiere equipos de aislamiento térmico en zonas de altas temperaturas, promover el transporte eléctrico público y privado. Promover el uso de paneles solares en techos de viviendas. Acceso a electricidad, gas y/o fuentes renovables de energía para necesidades básicas a precios accesibles. Atender zonas rurales donde aún usan leña para fomentar el uso de electricidad y disminuir enfermedades de pulmón en mujeres por el humo de la leña.