EMIR OLIVARES ALONSO / LA JORNADA
Ciudad de México. La dirigencia nacional del PAN se desmarcó de Genaro García Luna, el hombre que fue la mano derecha en materia de seguridad del gobierno panista de Felipe Calderón.
“García Luna nunca ha sido militante de Acción Nacional. Fue un funcionario de gobierno de primer nivel que, si se corrompió, debe pagar por sus actos”, apuntó la cúpula blanquiazul a través de un comunicado.
La esperada posición del partido del que emanó la administración de Calderón ante la declaratoria de culpabilidad en el juicio en Estados Unidos del ex titular de Seguridad Pública por narcotráfico y crimen organizado se dio tres días después del fallo del jurado.
El Comité Ejecutivo Nacional (CEN), en voz de su presidente Marko Cortés Mendoza, dijo a través de un video mensaje que su partido está “porque se haga justicia” y que cualquier servidor o ex servidor público que haya cometido un delito sea juzgado u castigado “con todo el peso de la ley”.
El líder panista señaló que “de manera tramposa, perversa y dolosa”, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador trata de identificar al ex funcionario de Seguridad Pública con el PAN, “pero él nunca fue panista. Presidente, ya no le siga mintiendo a la gente. Él con nosotros no tiene nada qué ver”.
Sin embargo, ni en el comunicado ni en el video mensaje de Cortés –en el que también habló la secretaria general del partido, Cecilia Patrón Laviada— no se hace alusión alguna al ex presidente Calderón ni a las consecuencias que su política contra el crimen organizado tuvo para el país.
El dirigente panista apuntó que la actual administración federal “presume como suyo el caso de García Luna, que penosamente tuvo que ser juzgado en Estados Unidos, porque el gobierno de López Obrador no tuvo la capacidad para hacerlo en México”.
A la par, exigió al mandatario federal “dejar de identificar a García Luna con el PAN y enfocarse en recuperar la paz en el país”; y aseguró que hoy México está viviendo “un narcoestado y un régimen autoritario donde se persigue a los opositores y la procuración de justicia no es pareja”.
El comunicado institucional, se dijo, es la posición ante la declaratoria de culpabilidad de García Luna del “Sistema PAN”, en el que además del presidente y la secretaria general del partido, también lo integran los coordinadores albiazules de los diputados federales, Jorge Romero; y de los senadores, Julen Rementería; así como el coordinador nacional de diputados locales, Enrique Vargas del Villar; y el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Santiago Creel Miranda.
La jerarquía blanquiazul aseveró que seguirá denunciando la que llamó “institucionalizada complicidad” con la delincuencia organizada del gobierno de Morena.
La cual, dijo acreditar con el saludo de mano que en su momento dio López Obrador a María Consuelo Loera, madre de Joaquín El Chapo Guzmán, quien fuera líder del cártel de Sinaloa y quien de acuerdo con la justicia estadundiense era el capo protegido por García Luna durante el gobierno de Calderón.
Los panistas también criticaron la política presidencial de “abrazos y no balazos a los delincuentes” al igual que el presunto “financiamiento de la delincuencia organizada a las campañas de Morena”.
De acuerdo al dirigente albiazul, esto “ha provocado la peor expansión territorial de la delincuencia en México”, ya que afirmó que con el actual gobierno “los narcos duplicaron el territorio bajo su control, los homicidios y feminicidos alcanzaron récords, creció el despojo de tierras y ganado”.
De su lado, la secretaria general del PAN apuntó: “Este gobierno actúa con dilaciones, favoritismos y componendas. Pero tarde que temprano, quienes hoy están vinculados con el narcotráfico lo pagarán aquí y en los Estados Unidos”.