Por Fernando Manzanilla Prieto
Como todos saben, en la elección intermedia del pasado domingo, en nuestro estado se renovó el Congreso local, es decir, 26 diputaciones de mayoría relativa y 15 de representación proporcional, que tomarán posesión el 15 de septiembre; así como las 217 presidencias municipales que iniciarán labores el próximo 15 de octubre. Asimismo, se eligieron los diputados de mayoría relativa en 15 de los 300 distritos electorales correspondientes al estado de Puebla para integrar la Cámara de Diputados.
De acuerdo con los datos preliminares proporcionados por la autoridad electoral tanto estatal como federal, ya se pueden observar algunas tendencias y adelantar algunas conclusiones sobre el balance del proceso electoral que vivimos el pasado 6 de junio en Puebla:
1. A pesar de que en esta elección en Puebla no se eligió gobernador, la participación ciudadana fue de 56%, muy por arriba del promedio nacional (52%), superando así todas las expectativas. De acuerdo con datos del PREP, la Lista Nominal de Actas Contabilizadas fue de 4 millones 460 mil ciudadanas y ciudadanos. Pues bien, el pasado 6 de junio acudieron a votar cerca de 2 millones 494 mil 600 personas, lo que no solo confirma el compromiso cívico de las y los poblanos, sino la convicción democrática de participar en la definición del rumbo de nuestro estado y de nuestro país.
2. Al ver la alta participación ciudadana, algunos grupos caciquiles y organizaciones de corte radical cometieron diversos actos de intimidación que lograron desalentar la participación ciudadana. A pesar de ello, la violencia y los actos de amedrentamiento, en general, no lograron manchar la jornada electoral. La respuesta ciudadana fue contundente, lo que ayudó a minimizar estos altercados. Al final, el mensaje ciudadano fue muy claro en favor del voto libre y pacífico.
3. En lo relativo a los resultados de la renovación del Congreso local, a reserva de que se confirmen las tendencias, se puede observar el predominio de una tendencia a la polarización de las preferencias electorales, en detrimento de los partidos nuevos. La Coalición PT/Morena, obtuvo el triunfo en 17 distritos locales, en tanto que la alianza PRI/PAN/PRD gana 9. Por el contrario, en cuanto al voto municipal, el mapa de Puebla se pintó de multicolor, prevaleciendo el pluralismo en las preferencias electorales.
4. En lo referente al voto para el Congreso federal, de los 15 distritos en disputa, la coalición Morena/PT/PVEM gana en 11, en tanto que la alianza PRI/PAN/PRD se lleva 4. Lo que significa que, en cuanto al voto federal, éste también se polarizó en detrimento de los partidos nuevos.
5. Finalmente, vale la pena comentar un fenómeno que habrá que analizar con más cuidado: a pesar de que en algunas regiones del estado y en la zona metropolitana de Puebla el voto favoreció a la alianza PRI/PAN/PRD, resulta extraño que en estas mismas demarcaciones la coalición Morena/PT/PVEM haya obtenido una alta votación para diputados locales. Dado el nivel de polarización del voto, este tipo de inconsistencias pueden estar asociadas a algunas irregularidades reportadas durante la entrega de paquetes electorales la noche de la elección. En todo caso, habrá que estar atentos a la apertura de los paquetes que se encuentren en esta situación y a que la autoridad electoral transparente al 100% los resultados.
En suma, en Puebla vimos una alta participación ciudadana, una jornada electoral con algunos conatos de violencia que no lograron afectar la elección. Se percibe una clara tendencia a favor de la alianza PRI/PAN/PRD en la zona metropolitana de Puebla, un voto diferenciado más plural para elegir presidente municipal en toda la entidad y un voto polarizado en favor de la coalición Morena/PT/PVEM para diputados federales.