Por Raúl Torres Salmerón
En aras de seguir en el presupuesto municipal y buscar la reelección en el año 2021, la actual Presidenta Municipal de Puebla Capital, la morena Claudia Rivera Vivanco, se dedica a efectuar declaraciones en lugar de gobernar y solucionar los problemas citadinos, como son la inseguridad, el ambulantismo, los baches, la basura, la falta de agua, el alumbrado público, el cierre del Centro Histórico, la pobreza y la desigualdad, entre otros.
En vez de gobernar se ha dedicado en los últimas semanas a pronunciar declaraciones como el apoyo a las defensoras del aborto en el Congreso del Estado, realizar un foro de 4 personas para prohibir la realización de corridas de toros, crear un Comité Intermunicipal para proteger Flor del Bosque ante la presión de intereses inmobiliarios, estudiar la posibilidad de establecer parquímetros, proponer que la BUAP y la UNAM actualicen Plan Municipal de Desarrollo Urbano para establecer las zonas donde construir viviendas y evitar áreas de riesgo.
Es decir, puro bla, bla, bla, cero gobierno y llamar la atención. Lo que seguramente desconoce la alcaldesa es que los poblanos tienen una pésima impresión de su gobierno. Varias encuestas la catalogan como una de las peores Presidentas Municipales del país y que una gran mayoría no votaría por ella para repetir en el cargo.
No cabe duda que MORENA quiere acabar con las fuentes de trabajo y las tradiciones. Llama la atención lo declarado respecto a las corridas de toros
La alcaldesa mencionó que llegó sin un compromiso más que acatar mandato popular y si prohibir las corridas de toros es un mandato popular que permitiría ser más humanos y sensibles.
Analizará en Cabildo la iniciativa del grupo de colectivos que piden prohibir las corridas de toros en el municipio y dijo dispuesta a pagar el costo social y político y convocará una consulta ciudadana.
FALLECE EL FUNDADOR DE EL RELICARIO
En esta vorágine de declaraciones municipales, el impulsor de la fiesta brava en Puebla al final del siglo pasado, el creador y constructor de la plaza de toros El Relicario, don Ángel López Lima falleció el 9 de noviembre a los 78 años de edad.
El destacado empresario tlaxcalteca y ganadero de Coyotepec, construyó El Relicario misma que cumplió el 18 de noviembre 32 años de existencia, le dio brillo a la tauromaquia en la Angelópolis y fue muy querido en Puebla. Además después de varios años de funcionamiento la donó al Gobierno del Estado.
López Lima hHizo de la fiesta taurina una industria y convirtió Puebla Capital en un importante lugar donde se proyectaron grandes toreros de la baraja nacional e internacional.
Fue ejemplo claro de trabajo y esfuerzo, pues desde muy pequeño salió a trabajar de su natal Cuapiaxtla, Tlaxcala, a la Ciudad de México, donde estudió Contaduría y se convirtió en un exitoso empresario cafetalero y un destacado hombre de negocios taurinos para rematar como un ganadero.
Le sobreviven su esposa María Serafina Zamora y sus hijos Liliana y Miguel Ángel López Zamora.
Llevó las riendas de muchas plazas de toros además de El Relicario de Puebla, también El Pinal en Teziutlán y las plazas de Pachuca, Tlaxcala y Huamantla.
De acuerdo al cronista taurino Paco Terán, al construir la plaza de toros El Relicario, cambió la historia taurina de la ciudad de Puebla.
Antonio Casanueva Fernández, hijo de un poblano por adopción, don Antonio Casanueva y Velasco, fallecido a principios de 2020, escribió en el portal digital Al Toro México sobre la gratitud cuyo ejemplo lo vivimos en Puebla en noviembre de 1988 cuando José Ángel López Lima le regaló a la ciudad una plaza de toros: El Relicario.
Añadió: En Puebla no había plaza de toros. Se organizaban corridas en improvisadas plazas portátiles. Así que José Ángel decidió construir El Relicario y donárselo a la ciudad. Esa acción cambió la historia taurina de Puebla y transformó la vida de muchas personas. Gracias a esta nueva plaza se activó la economía de la ciudad, se dinamizó el turismo, proporcionó entretenimiento, pero, sobre todo, le permitió a mucha gente soñar.
Agrega: Leímos dos tristes noticias. La primera, la muerte de don José Ángel López Lima a la edad de 78 años. Y la segunda, el anuncio de la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, de intentar a toda costa, prohibir las corridas de toros en su municipio. No hubo argumentos, la declaración de Rivera Vivanco está cimentada en la ignorancia, a través del oportunismo político, intentando desviar la atención de los errores de su gobierno.
Señala finalmente: Dos modelos opuestos: José Ángel, un ejemplo de gratuidad, de amor a la ecología y a la dignidad de los seres humanos; Claudia, política oportunista, visceral que, para esconder sus fallas, busca destruir la cultura mexicana.
Hasta aquí lo redactado por Antonio Casanueva. Para la reflexión sin duda de la autoridad municipal, que quiere destruir fuentes de empleo y tradiciones tan antiguas como la fiesta taurina.
La familia taurina está de luto Descanse en paz el ganadero, empresario taurino e impulsor de la fiesta brava en Puebla, José Ángel López Lima.
En fin, como escribió Federico García Lorca (España, 1898-1936), en su elegía Llanto por Ignacio Sánchez Mejías:
¡Qué gran torero en la plaza!
¡Qué buen serrano en la sierra!
¡Qué blando con las espigas!
¡Qué duro con las espuelas!
¡Qué tierno con el rocío!
¡Qué deslumbrante en la feria!
¡Qué tremendo con las últimas
banderillas de tiniebla!