La participación mexicana ha venido creciendo de forma ininterrumpida a lo largo de la última década, desde el nivel de 59.4% que registró en el 2014.
Roberto Morales / El Economista
México registró una participación récord de 83.9% en el total de importaciones de cerveza a Estados Unidos en el primer semestre de 2024, de acuerdo con datos del Departamento de Comercio estadounidense.
El mercado de cerveza de importación estadounidense sumó 3,887 millones de dólares de enero a junio del año en curso, con embarques mexicanos por 3,262 millones.
La cerveza es el producto del sector agroindustrial más exportado por México a su vecino del norte en flujos comerciales dominantes, con Estados Unidos como el primer importador y México como el mayor exportador del mundo.
Además de ser el mercado más grande de esta bebida, también se caracteriza por su gran dinamismo: en la última década, las importaciones estadounidenses desde todo el mundo no dejaron de crecer año con año, ni tampoco las ventas de México a ese destino.
Y todavía mejor: la participación de México en las importaciones estadounidenses de cerveza creció continuamente desde 2014, cuando era de 59.4 por ciento.
Esto implica que México aumentó desde entonces 24.5 puntos porcentuales su cuota de mercado y que ahora más de ocho de cada 10 cervezas importadas y consumidas en Estados Unidos se producen en territorio mexicano.
En el verano del 2023 una marca producida en México, Modelo Especial, destronó a la local Bud Light como la marca más vendida en el mercado estadounidense, arrebatándole el trono que ocupó por dos décadas.
Si bien tuvo que ver en ello un boicot contra la marca alentado por un segmento de público de corte conservador luego de que Bud Light estableciera una relación publicitaria con un activista transgénero el año pasado, este 2024 Grupo Modelo se ha mantenido como líder de mercado.
La primera empresa cervecera en México fue Cervecería Cuauhtémoc, establecida en 1890 en Monterrey. Aunque no fue la primera en iniciar la producción de cerveza en el país, su creación significó el comienzo del crecimiento industrial de la cerveza en México.
Después de México, los Países Bajos se ubicaron en la segunda posición en el total de importaciones de cerveza a Estados Unidos en la primera mitad de 2024, con 366 millones de dólares, seguidos de Irlanda (83 millones), Canadá (41 millones) y Alemania (34 millones).
Fluyen inversiones
Durante los últimos años, las dos mayores empresas cerveceras del mundo, la belga brasileña AB InBev y la neerlandesa Heineken, han incrementado su capacidad de producción en México, junto con la estadounidense Constellation Brands.
Durante el año fiscal 2024 (concluido el 29 de febrero pasado), Constellation Brands tuvo gastos de capital por 1,269 millones de dólares, incluidos 947.9 millones para el segmento de Cerveza, principalmente para los Proyectos de Cerveza en México.
Constellation Brands planea gastar entre 1,400 millones y 1,500 millones de dólares en gastos de capital en el año fiscal 2025, incluidos aproximadamente 1,200 millones para el segmento de Cerveza asociado principalmente con los Proyectos de Cerveza en México.
Los gastos de capital restantes planificados para el año fiscal 2025 consisten en mejoras a las instalaciones operativas existentes y reemplazos de equipos y/o edificios existentes.
Justo este miércoles, Bernardo Martínez, vicepresidente de Asuntos Públicos de Constellation Brands México dijo que hacia fines del 2025 la empresa arrancará la operación de su nueva planta cervecera en el estado de Veracruz.
En 2023, Heineken anunció una inversión en México de 430 millones de euros para construir una cervecería de última generación en Yucatán, con un enfoque en prácticas de elaboración de cerveza sustentables, con la generación de más de 2,000 empleos directos e indirectos.
En asociación con Millfoods, AB InBev anunció una inversión de 300 millones de dólares para construir una planta procesadora de maíz cultivado localmente en Guanajuato, México. Se espera que el proyecto genere más de 1,000 puestos de trabajo y beneficie a 20,000 agricultores mexicanos para 2024.
En 2010, México se convirtió en el mayor exportador de esta bebida en el mundo, desplazando a la segunda posición a Países Bajos.