AÍDA PELÁEZ-FERNÁNDEZ / REUTERS
CIUDAD DE MÉXICO, 22 ene (Reuters) – A sólo cinco meses de las elecciones presidenciales de México, una encuesta entre ejecutivos de empresas publicada el lunes reveló que sus principales preocupaciones se centran en el resultado de la votación, además de preocupaciones de larga data sobre la inseguridad que arrastra a la economía.
La encuesta realizada por la consultora KPMG mostró que el 58% de los ejecutivos ven la carrera presidencial como la variable más importante para sus operaciones, incluso por encima de una potencial desaceleración económica.
En junio, los votantes mexicanos elegirán entre la candidata del partido gobernante Claudia Sheinbaum, la ex alcaldesa de la Ciudad de México que promete continuidad con las políticas del presidente izquierdista saliente Andrés Manuel López Obrador, y la principal aspirante de la oposición, Xóchitl Gálvez, que propone un enfoque más favorable a las empresas.
Se considera que la popularidad de López Obrador le da ventaja a Sheinbaum, quien actualmente es la favorita en la mayoría de las encuestas.
Casi la mitad de los 900 ejecutivos encuestados coincidieron en que el riesgo más apremiante para las empresas mexicanas es un deterioro del Estado de derecho y un empeoramiento de la inseguridad.
Los riesgos asociados con el estado de derecho y la inseguridad pasaron del cuarto lugar en la encuesta del año pasado al primero en la última edición, dijo a los periodistas Gerardo Rojas de KPMG en una conferencia de prensa.
A pesar de las preocupaciones sobre la gobernanza futura, más de la mitad de los participantes espera que la economía de México mantenga su tasa de crecimiento actual en 2024, mientras que el 30% la considera estancada. Otro 13% cree que la economía entrará en recesión.
El año pasado, México superó al peso pesado regional Brasil como el mejor destino para inversionistas, incluso para fusiones y adquisiciones.
«Nos llamó la atención que México desplazó a Brasil en el ranking. Históricamente, Brasil era el país preferido», dijo Rojas.
Señaló que las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China han beneficiado a México con el llamado nearshoring, ya que muchas empresas buscan reubicar sus operaciones desde Asia para estar más cerca de las cadenas de suministro estadounidenses.
Información de Aida Peláez-Fernández; Edición de David Alire García y Bill Berkrot