La caída de la mano de obra disponible para cubrir vacantes en bares, galerías, restaurantes y hoteles ha afectado a todo el sector servicios, incluso a la Casa Real británica, desde la implementación del Brexit.
MARÍA SIERRA / Londres / LOC
No habrá visitas guiadas a Clarence House este verano. La residencia londinense de Carlos III y la reina Camila permanecerá cerrada al turismo local e internacional este agosto debido a la falta de personal dispuesto a atender, guiar y servir al viajero interesado en la vida y las costumbres de la familia real británica.
La caída de la mano de obra disponible para cubrir vacantes en bares, galerías, restaurantes y hoteles afecta a todo el sector servicios desde la implementación del Brexit, particularmente en Londres. Y el impacto de los obstáculos introducidos por sucesivos gobiernos conservadores en la contratación de profesionales y estudiantes comunitarios ha hecho mella ahora en el negocio veraniego de los royals.
La Royal Collection Trust, el ente que gestiona los recorridos por las casas del rey y organiza exposiciones en palacios y mansiones reales, contrata unos 350 trabajadores adicionales durante la temporada veraniega pero este año no ha podido rellenar todos los huecos previstos.
Las restricciones en la contratación de nacionales de la Unión Europea -limitada a empleos con un sueldo mínimo de 42.000 euros desde el pasado abril- ha trastocado los planes del verano. El letrero de «cerrado» cuelga ya en las casillas digitales de Clarence House y la muy popular Frogmore House, en los terrenos del castillo de Windsor.
Carlos y Camilla se mudaron en 2003 a Clarence House, la casona de fachada blanca que se esconde tras los árboles del paseo The Mall, a corta distancia del palacio de Buckingham. La abuela del rey, la reina madre Elizabeth, dejó su huella decorativa en este inmueble del siglo XIX, construido por el arquitecto John Nash para el duque de Clarence, futuro Guillermo IV.
Los inquilinos actuales veranean habitualmente en Escocia y permiten la entrada de turistas a su hogar urbano, en visitas guiadas de unos 45 minutos. El recorrido atraviesa cinco espacios de la planta baja y un coqueto jardín.
Clarence House se cerró al público en 2009 para acometer obras de rehabilitación y, tras el parón forzado durante la pandemia, su reapertura estaba prevista para 2024.
MÁS CIERRES
También Frogmore House quedará fuera del circuito monárquico este verano. Esta gran mansión y sus jardines del siglo XVIII se ubica a corta distancia del hogar de los príncipes de Gales, en la finca protegida de Windsor. Kate Middleton sigue un tratamiento de cáncer y es probable que pase las vacaciones escolares de sus tres hijos con el príncipe Guillermo en su refugio campestre de Norfolk.
Sus cuñados, Harry y Meghan, celebraron la fiesta de su boda en los decorados salones de Frogmore House, que Jorge III hizo construir para su mujer, la reina Carlota, en 1792.
El duque de Sussex tuvo que renunciar a su base familiar en Inglaterra, Frogmore Cottage, que le cedió su abuela, la difunta reina Isabel, meses después de la accesión de Carlos al trono. Harry abre su polémica biografía, Spare, con una torcida conservación con su padre y su hermano, que transcurre, precisamente, en los jardines de la mansión de Frogmore.
Fuente: https://www.elmundo.es/loc/famosos/2024/05/28/6655a6b0e9cf4af9778b45a5.html