EFRAÍN NUÑEZ / LA JORNADA DE ORIENTE
Desorganización, desinformación y protestas enmarcaron este martes la jornada de vacunación en el Centro Expositor, en la que se inoculó con refuerzo a adultos de 50 a 59 años, segundas dosis de niños de 12 a 17 y rezagados, quienes tuvieron que esperar hasta cinco horas para obtener el biológico.
Los poblanos acudieron en masa, acompañados de sus familiares, lo que provocó que la organización se le saliera de control a los llamados servidores de la nación.
Los que llegaron desde temprana hora tuvieron la posibilidad de pasar rápidamente; sin embargo, fue después del mediodía que la fila que iniciaba en la entrada principal del recinto, a la altura del Planetario, se extendió por todas las avenidas de los Fuertes de Loreto y Guadalupe y le dio hasta tres vueltas a locaciones como Casa Puebla.
Quienes llegaron al mediodía recibieron la vacuna hasta después de las 8 de la noche, en una espera en medio del frío y en muchos casos sin probar alimentos.
Aunque llegaron desde la mañana, la noche les alcanzó y tuvieron que comprar cemitas de los puestos de la zona o alimentos del comercio informal para alimentarse y no sentirse mal tras recibir el biológico.
Los propios servidores de la nación reconocieron que se había superado la expectativa en el contexto del incremento de contagios por la presencia de la variante ómicron en Puebla.
Aunque en un principio la propia gente organizó las filas por rangos de edad, al finalizar la jornada había una sola línea de personas en la que se incluía a todos los rangos de edad.
Ni los servidores de la nación, ni los agentes de Seguridad Pública municipal se atrevían a poner orden pese a la presencia de automovilistas en doble fila, vendedores informales y curiosos.
La larga espera molestó a las personas que tenían mucho tiempo formados e incluso hubo gente que burló el orden establecido y se colocó en lugares más adelante.
La avenida Ejército de Oriente era un mar de gente que entraba y salía del recinto con sus papeles en mano o en búsqueda de sus acompañantes.
En su mayoría eran jóvenes, pero también hubo un gran número de rezagados, que acudió ante el miedo de formar parte de la estadística de infectados por la nueva cepa del Covid-19.
Ante la desinformación, personas de más de 50 años acudieron a recibir el refuerzo pero no pudieron vacunarse debido a que han transcurrido menos de seis meses de recibir el segundo biológico.
Sin embargo, tuvieron que esperar cinco horas para que algún servidor público les dijera que aún no aplicaban para el refuerzo.
Asimismo, personas del rango de edad de entre 40 a 49 años se acercaron para recibir el refuerzo; sin embargo, los servidores de la nación les comentaron que para ellos no se ha abierto aún la jornada de vacunación y les sugirieron registrarse en la página de Internet de la Brigada Correcaminos.
Después de las 16 horas se registró un largo embotellamiento sobre la calzada Zaragoza que prácticamente iniciaba desde el bulevar 5 de Mayo y terminaba al salir del puente elevado.
El ingreso de los automovilistas a las calles aledañas al recinto en el cerro de Loreto y Guadalupe era a vuelta de rueda.
Quienes llegaban no encontraban estacionamiento, por lo que optaban por bajar a sus familiares y después regresar por ellos o por esperarlos en doble fila.
A las 17 horas, los integrantes de la Brigada Correcaminos sugirieron a quienes llegaron a formarse después de las 16 horas regresar este miércoles a primera hora ante el riesgo de que se acabara el biológico.
Incluso afirmaron que no había certeza de que quienes estaban formados desde una hora antes obtuvieran la inoculación debido a la creciente demanda.
Fuente: https://www.lajornadadeoriente.com.mx/puebla/desorganizacion-y-protestas-durante-la-vacunacion-de-jovenes-adultos-y-rezagados-en-el-centro-expositor/