«Vestis virum reddit» ( El vestido hace al hombre), Marco Fabio Quintiliano
RAQUEL PÉREZ POLO / COPE
Con la pandemia nos hemos acostumbrado a extremar las medidas de limpieza no solo con el lavado de manos, la desinfección de objetos, incluso hemos comenzado a dejar el calzado antes de entrar en casa. Medidas de higiene que ya utilizaban en Roma. Era de buena educación quitarse los zapatos que se usaban en la calle y calzar unas sandalias especiales para andar por casa.
Si de algo hablamos todos los días, desde hace algo más de dos semanas, es de la huelga de transportistas, de la huelga de camioneros. Camión viene del normando que, a su vez, viene del latín «carrus», que se utilizaban para el transporte de mercancías.
Esta semana hemos mirado al cielo y al suelo o a nuestro coche para ver cómo lo había cubierto la calima, ese polvo en suspensión procedente del Sáhara. Pues ya en la Antigua Roma hablaban de «calina», palabra que procede de «calíginem» (que significa niebla, oscuridad). Con la evolución de la lengua desaparece la g entre vocales = caline, pasa al femenino, calina. Se sustituye la n por la m de cauma, que significa literalmente «bochorno atmosférico», explica el Doctor en Filología Clásica por la Universidad Complutense, Emilio del Río.
Y podríamos seguir y seguir …, porque cualquier cosa que ahora nos pasa ocurrió antes en la Antigua Roma, sus costumbres se han prolongado en el tiempo – hasta tenían su versión del Madrid Central «porque cerraban las áreas centrales de las ciudades» cuenta el profesor Del Río-, sus filósofos son eternos, su forma de debatir en el Senado, objeto de envidia por su oratoria. Han dejado una huella que encontramos allí por donde pasaron.
No estaría mal, por lo tanto, hacer un viaje al siglo VIII, al VII a. C. Ya entonces, los «locos romanos» que diría Obélix, dormían con pijama, no salían de casa con la ropa arrugada ni despeinados y poner la toga encima de la túnica era todo un rito porque debía ir colocada perfectamente.
¿Cómo vestían los romanos? Túnicas, togas, colores
La túnica era la prenda de vestir por excelencia. Era la vestimenta que utilizaban todas las clases sociales desde los más pudientes a los más pobres. La túnica que llevaban los hombres y los niños era de manga corta o sin mangas y les llegaba a las rodillas. La de las mujeres y las niñas llegaba hasta los pies y tenía mangas. Por encima de la túnica, los hombres utilizaban la toga y las mujeres, si eran casadas, llevaban un manto de lana.
Poner la toga es todo un rito como podemos leer en el perfil de Twitter de AliciaMimundo, experta en historia. La prenda más importante para un ciudadano romano es la toga «extendida en el suelo tiene forma de semicírculo y mide 6 metros de diámetro. Así que no es posible ponérsela correctamente sin ayuda de un esclavo que con delicadeza recoge la punta y la pasa por debajo de la axila dando una vuelta al tórax hasta rodear el cuello, y en el hombro se fija, no siempre, con un broche. A veces la punta es tan larga que debe repetirse de nuevo la operación. Los pliegues deben estar perfectos».
En esta lección de historia que podemos seguir en Twitter: la toga de los niños era blanca sin adornos, sin colores. La toga Candida, «la utilizan aquellos varones candidatos a ocupar un cargo -de ahí el origen de la palabra “candidato”-«. La toga Trabea, «con franjas de color púrpura o azafrán, la portaban los augures -sacerdotes encargados de observar e interpretar los signos naturales-«; la toga Picta, estaba «reservada a los generales que la exhiben en sus triunfos y decorada con dibujos, bordados dorados o colores fuertes -también la usaron los cónsules en la época del Imperio y el emperador teñida de un púrpura sólido-«.
Contra el frío usaban distintas capas, algo que también hacemos ahora: por debajo una túnica más fina y encima una túnica de lana más la toga también gruesa. En Hisour Arte Cultura Historia podemos leer que «el emperador Augusto, cuyo físico y constitución nunca fueron particularmente robustos, vestía hasta cuatro túnicas, con un chaleco», para combatir las bajas temperaturas del invierno.
El subligaculum y el strophium, la ropa interior de la antigüedad
¿Y qué llevaban los romanos y las romanas debajo de las túnicas? Pues ellos,el subligaculum,el equivalente al calzoncillo actual que iba atado mediante cintas a la cintura y que se llevaba debajo de la túnica. A veces, los esclavos solo llevaban el subligacula cuando realizaban trabajos forzosos. Las mujeres usaban tanto el taparrabos como el strophium para cubrir los pechos debajo de la túnica. Muestra de ello es el mosaico siciliano del siglo IV d. C. en el que se puede ver a varias mujeres con estas prendas realizando hazañas atléticas.
Pero, calceus, caligae y solae, para cubrir los pies
En Roma, los zapateros tenían mucho trabajo porque a los romanos les gustaba andar calzados. El «calceus» –que estaba hecho de cuero y cubría todo el pie y la planta y se ataba con tiras de cuero al tobillo o la pierna-, era el más utilizado porque, a su vez, era obligatorio como la toga para los ciudadanos de cierta posición social. En las esculturas y pinturas de la época podemos ver que había distintos tipos de calzado: el calceus presenta distintas variedades, había el «calceus patricius» -un zapato cerrado que subía hasta la pantorrilla y se anudaba con tiras cruzadas-, que usaban los nobles más privilegiados o el «calceus senatorius» que calzaban los senadores y que estaba hecho con piel tintada de negro; también estaban los «pero» -un calzado sin tacón que cubría hasta el tobillo-, que era el que más usaban los plebeyos; las «caligae» que se sujetaban al pie con una suela reforzada con clavos de hierro o cobre y que eran utilizadas sobre todo por los soldados; o las «solae» que podríamos decir que eran las zapatillas de andar por casa y que solo constaban de una suela que se ataba sobre el empeine con dos correas y los «sculponeae» que eran una especie de zuecos de madera o corcho.
Y lo dicho al principio, los romanos no andaban por casa con el calzado de la calle. Es más, era de muy buena costumbre y educación que si ibas a visitar a un familiar o amigo llevaras las «solae» para andar por el interior de la «domus» (de la casa).
Caligae, «la botita» que dio nombre al emperador Calígula
Cayo César Augusto Germánico (emperador de Roma del año 37 al 41 d. C.) ha pasado a la historia por su crueldad, sus excentricidades -como nombrar a su caballo Incitato, cónsul además de construirle un lujoso establo de mármol en donde el animal dormía con mantas de púrpura-, su orgullo y deseos de gloria desmedidos -erigió en Roma dos templos consagrados a su persona-, y por la curiosidad del origen del nombre por el que realmente era conocido, Calígula.
Pocos le llamaban Cayo, desde los tres años le apodaron Calígula porque siempre iba vestido con el uniforme de los legionarios ya que estaba en los campamentos de Germania con sus padres, Germánico (el gran príncipe de Roma) y Agripina que fue quien le confeccionó el pequeño uniforme con sus pequeñas caligae (botitas).
No fue el único emperador romano que debió su sobrenombre a la vestimenta, Marco Aurelio Severo Antonino (aunque su verdadero nombre era Lucio Septimio Basiano) era conocido como Caracalla por una capa larga con capucha de origen galo y que él introdujo en Roma. Caracalla como Calígula también fue asesinado tras un reinado tiránico, uno de los más despóticos de la historia romana.
Podríamos decir que estos apuntes sobre la vestimenta de los pobladores de la Antigua Roma es solo el principio. Se pueden escribir miles de artículos porque como decía Hans Christian Andersen: «Roma es como un libro de fábulas, en cada página te encuentras con un prodigio».
Fuente: https://www.cope.es/actualidad/cultura/noticias/como-vestian-los-romanos-togas-tunicas-subligaculum-caligaes-que-dieron-nombre-caligula-20220403_1998929