Desde 1994, cada 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Alzheimer, fecha para crear conciencia sobre esta enfermedad
LUIS ESTRADA / CONECTA
Las llaves, el nombre de un compañero de clase u olvidar algo que tenías que hacer. Constantemente olvidamos, pero ¿cómo saber si me está dando Alzheimer o son un simple despiste?
La pérdida de memoria asociada con la edad es común; sin embargo, la dificultad para recordar fechas, concentrarse, planificar o resolver problemas pueden ser cambios asociados al Alzheimer, explica Miguel Ángel Ontiveros, profesor investigador del Tec de Monterrey campus Toluca
El Alzheimer es un tipo de demencia que tiene dos formas de presentarse: familiar, donde la genética es determinante y que ocurre en menos del 10% de casos; y la esporádica, que aparece en el 90% de pacientes en el mundo.
La enfermedad empeora con el paso de los años, es progresivo, en el que los síntomas de demencia empeoran gradualmente hasta perder la capacidad de mantener una conversación y responder al entorno.
“De la forma esporádica seguimos estudiando la serie de eventos que detonan esta catástrofe que va a aniquilar las neuronas del hipocampo, este circuito neuronal que ayuda a consolidar las memorias operativas a largo plazo”, detalló Ontiveros.
En México, un millón 300 mil personas padecen Alzheimer, lo que representa el 8 por ciento de los adultos mayores en el país, según cifras de la Secretaría de Salud federal,
La edad es el factor de riesgo más importante del Alzheimer, entre más grande de edad seamos más probabilidad hay de padecerla.
“Si un humano antes de los 65 años comienza a experimentar afectaciones cognitivas muy serias, pues tendría que pensar que algo anda mal.
“Es muy difícil que el Alzheimer se presente antes de esa edad, y si se da es por una forma genética o precoz de la enfermedad”, enfatizó.
Cómo saber si me está dando Alzheimer
“No todos los problemas de memoria son Alzheimer”, explicó el neurólogo Leonel Adrián Cantú, del Instituto de Neurología y Neurocirugía del Hospital Zambrano Hellion de TecSalud.
Los pacientes que van a desarrollar la enfermedad comienzan con problemas leves de memoria y síntomas que debemos identificar:
– Problemas de memoria a corto plazo.
Por ejemplo, algo recién aprendido, conversaciones o fechas importantes.
– Dificultad para orientarse
Sobre todo, en lugares ya conocidos o perderse fácilmente.
– Cambios de personalidad
Alguien que antes era muy alegre y luego de un tiempo hacia acá empieza con cambios en su estado anímico.
– Pérdida de capacidad de hacer cosas que antes sabía hacer.
Por ejemplo, seguir una receta de cocina o algo relacionado con su trabajo.
“Estos son signos que podríamos catalogar como tempranos, antes de clasificar e identificar si el paciente presenta deterioro cognitivo leve, que es una etapa previa a una demencia y que puede ser Alzheimer”, detalló el investigador de TecSalud.
Junto con la afección de la memoria, habilidades cognitivas como la toma de decisiones que comprometan su vida operativa, así como las interacciones familiares, sociales, cuadros depresivos y aislamiento se suman a los síntomas.
“A todo mundo se nos olvidan las cosas, pero cuando estos olvidos comprometen a los pacientes, como extraviarse o que no recuerden cómo llegar a casa o el nombre de sus familiares, es cosa seria”, añadió el profesor Ontiveros.
“A todo mundo se nos olvidan las cosas, pero cuando estos olvidos comprometen a los pacientes, como extraviarse o que no recuerden cómo llegar a casa o el nombre de sus familiares, es cosa seria”.
Los familiares son los primeros en identificar que algo no anda bien. Cantú Martínez, de TecSalud aseguró que muchas personas vienen a consultar porque su papá o mamá repite preguntas o historias varias veces.
¿Y el paciente puede identificar sus síntomas? La capacidad de introspección para reconocer alguna de estas afecciones también se ve afectada.
“(Esto) crea un mecanismo de defensa para no reconocer qué está pasando o, que se den cuenta, tratan de poner barreras para evadir preguntas con indiferencia”, explica el neurólogo del Hospital Zambrano Hellion.
¿Qué hacer si aparecen las primeras señales de Alzheimer?
La recomendación mayor es tratar de identificar los síntomas para poder intervenir a tiempo.
«Cuando los familiares identifican problemas de memoria o patrones anormales en algún familiar deben de acudir a revisión de un neurólogo”, mencionó el Dr. Cantú Martínez.
En el consultorio, tanto familiares como al paciente, se someten a una evaluación mediante un interrogatorio.
“Con base en los resultados de las evaluaciones hacemos algunas escalas que nos ayudan a medir en qué fallan, no solo en memoria, sino en otros parámetros cognitivos. También se solicitan estudios de sangre y de imagen cerebral”.
La enfermedad de Alzheimer solo se diagnosticaba con total certeza después de la muerte, a través de una biopsia. Sin embargo, esta serie de estudios permite identificar la enfermedad.
«Cuando los familiares identifican problemas de memoria o patrones anormales en algún familiar deben de acudir a revisión de un neurólogo”.
El Alzheimer no tiene cura y en cuanto a los tratamientos se han realizado muchas investigaciones con el objetivo de obtener fármacos que puedan detener o disminuir la enfermedad, pero muchos de ellos han fallado, reconoció el neurólogo de TecSalud.
Toda la interacción terapéutica-farmacológica para tratar actualmente este mal es para prácticamente abatir su avance, porque el mecanismo detonante de la muerte de neuronas no se detiene.
Y en sí lo que se promueve con los medicamentos es mejorar la salud cognitiva de los pacientes a nivel neurológico
Esto se debe a que los cerebros afectados por la enfermedad se han encontrado depósitos anormales de dos proteínas que destructuran la arquitectura cerebral, conocidas como beta-amiloide y proteína tau.
El profesor Ontiveros aseguró que se han dado a conocer evidencias de cómo algunos componentes podrían afectar la agregación de estas proteínas, que de lograrse supondría una esperanza terapéutica para avanzar mucho.
¿Cómo tratar a la familia con un enfermo de Alzheimer?
Los familiares y/o cuidadores son parte importante del tratamiento y dependen de la buena o mala evolución de los pacientes.
“Cuando se trata a un paciente hay que tomar en cuenta que la familia sufre demasiado también. El hecho de tener un paciente impacta mucho el seno familiar a nivel económico, emocional”, mencionó el profesor Ontiveros.
Se hacen escalas de cómo se encuentran ellos emocionalmente, se brindan asesorías para que conozcan mejor la enfermedad, sepan interactuar y cómo enfrentar los cambios a los largo del tiempo.
“Son muchas cosas que poco a poco los familiares aprenden con sus pacientes como mejor alimentación, ejercicio físico y cognitivo que son parte del material que les sugerimos hacer”, mencionó el Dr. Cantú.
21 de septiembre: Día Mundial del Alzheimer
El 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Alzheimer, fecha instituida desde 1994 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Federación Internacional del Alzheimer.
El Dr. Cantú considera que este día debe ser para concientizar a la población que conforme avance la esperanza de vida la incidencia de la enfermedad será mucho mayor, por lo que llamó a los jóvenes a sumarse a las estrategias de prevención del Alzheimer.
“Necesitamos tener una mejor alimentación, entrenamiento físico y cognitivo. Entre más aumentemos nuestra reserva cognitiva y aprendamos cosas diferentes en nuestra juventud y adultez temprana mejor será nuestro futuro” , finalizó el especialista médico.