Un cálculo del Banco Santander estima que la mitad de la inversión que la empresa automovilística estadounidense realizará en México, que se estima que oscilará entre los 5.000 y 10.000 millones de dólares, repercutirá en empresas mexicanas. Lo explicamos.
JORGE HURTADO / FRANCE 24
«Si calculamos que son 5.000 millones de dólares, siendo sumamente conservadores, la mitad será contenido nacional, 2.500 millones de dólares”, vaticinó el director de análisis y estrategia bursátil del Banco Santander, Alan Alanis.
Según él, las grandes empresas del país obtendrían beneficios equivalentes a cerca del 80 % de la inversión que haga la empresa de Elon Musk en la norteña ciudad de Monterrey, mientras que alrededor del 20 % repercutiría en las pymes.
Durante una conferencia sobre el fenómeno conocido como relocalización o «nearshoring», analistas del banco valoraron positivamente la llegada de Tesla por su impacto en la economía mexicana.
La inversión realizada por Musk oscila entre el 4 % y el 8 % del Producto Interno Bruto (PIB) mexicano, según Alanis.
«Esta inversión es más grande que las tres más grandes que se habían hecho en la industria automotriz en México», agregó.
Para Rodolfo Hernández, director ejecutivo de negocio internacional del banco, las empresas mexicanas poseen la calidad suficiente para ser proveedores de compañías como Tesla, ya que en los últimos años han invertido en «procesos, productos y capacitación».
«Las empresas saben de la situación del país y están dispuestas a invertir. Tesla es el mejor ejemplo, las condiciones que ofrece México difícilmente las puede ofrecer otro país y va a tener beneficios para las pymes y sus empleados, las que van a nacer y las que ya están», añadió.
Según la subsecretaria de Asuntos Multilaterales de la Cancillería mexicana, Martha Delgado, la inversión rondará los 5.000 millones de dólares y será la planta de vehículos eléctricos más grande del mundo, la primera de Tesla en América Latina.
La planta de Tesla en Monterrey abriría una nueva era de vehículos eléctricos en México
La fábrica de Monterrey será una de las primeras en México dedicada a la fabricación de vehículos eléctricos y representa una oportunidad para que el país latinoamericano pase del suministro de los fabricantes de vehículos de gasolina y diésel, a ser un hub para otras compañías del sector.
México, según los analistas, ofrece ventajas como una mano de obra relativamente barata y acuerdos de libre comercio con 50 países, mientras Estados Unidos solo tiene acuerdos similares con 20.
Uno de esos acuerdos es el tratado entre EE. UU., Canadá y México, conocido como T-Mec, que facilitará que los vehículos eléctricos fabricados al sur de la frontera puedan optar a créditos fiscales de hasta 7.500 dólares ofrecidos en la La Ley para la Reducción de la Inflación del presidente estadounidense Joe Biden.
Con EFE