MANUELA CANO / FRANCE 24
El último año de mandato del derechista Iván Duque estuvo marcado por el crecimiento de los cultivos de coca en Colombia. Así lo dio a conocer la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito este jueves. Según el informe, tanto los cultivos como la producción potencial de cocaína se incrementaron llegando a récords en la historia del país.
Dos máximos históricos. El año pasado en Colombia podrá ser recordado por los récords del área sembrada de coca en el país y también de la producción potencial de cocaína.
Según el Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (SIMCI) de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), el país latinoamericano tuvo un incremento del 43% en el área sembrada con coca en su territorio, pasando de 143.000 hectáreas en 2020 a 204.000 ha en 2021. Esto constituye a un retroceso con respecto a los últimos tres años en donde se venía presentando una reducción a la tendencia de crecimiento.
Al mismo tiempo, el último año del Gobierno de Iván Duque estuvo marcado por el aumento de la producción potencial de clorhidrato de cocaína, que pasó de 1.228 toneladas en 2020 a 1.400 en 2022.
El informe de la ONU denominado como “Monitoreo de territorios afectados por cultivos ilícitos 2021” da más detalles acerca de las causas y la localización de dicho incremento.
Varios datos encienden las alarmas del nuevo presidente, el izquierdista Gustavo Petro.
El texto señala que el 62% de los cultivos se encuentran en solo tres de los departamentos del país: Nariño, Norte de Santander y Putumayo.
Además, muestra que 45% de estos están en 10 de los municipios colombianos. Y recalca que el 52% de los cultivos se encuentran en zonas de manejo especial, es decir en Parques Nacionales Naturales, reservas forestales, Resguardos Indígenas y Tierras de las Comunidades Negras.
¿Por qué se presentó el aumento?
El aumento de los cultivos en Colombia no se puede explicar por solo una razón, es más bien un resultado multifactorial. Según la ONU, hay causas de corto y largo plazo, al mismo tiempo que unos aspectos estructurales.
Tres son los factores a corto plazo encontrados por la ONU: la reducción de la intervención, el posicionamiento de nuevos grupos criminales y el deterioro de las condiciones debido a la pandemia. Estos son elementos que pueden compararse con medidas llevadas a cabo en los años en los que hubo una reducción (2017-2020), como una intervención sostenida o el impulso a la erradicación voluntaria.
Ahora bien, el informe señala que existen factores que trascienden el corto plazo, es decir, los últimos cuatro años, y que son significativos a la hora de explicar el crecimiento de los cultivos. En este caso, la ONU señala otros tres: los cambios en el control territorial, la mayor oferta y la tendencia a la concentración de los enclaves.
Según el organismo, uno de los aspectos que se generaron debido, en parte, al no cumplimiento de los Acuerdos de Paz entre la extinta guerrilla de las FARC y el Estado colombiano, es precisamente que el control de los territorios con mayores cultivos de coca dejó de ser hegemónico. Pasó de tres grupos a cerca de sesenta en 2021.
Para Luis Eduardo Celis, asesor de la Fundación Paz y Reconciliación (Pares) esto se explica básicamente ante la incapacidad de generar un control territorial por parte del Estado colombiano en estos lugares del país.
“Para mi toda esa complejidad hay que simplificarla en el control del territorio, si tú no tienes control del territorio, no tienes nada. Si la gente está a merced de los ilegales, será un permanente ciclo de fracasos.”, señala Celis.
Estos actores además son diversos, van desde grupos armados ilegales hasta narcotraficantes y productores.
Pero dicho factor está lejos de ser la única explicación a largo plazo del aumento de los cultivos. Otro aspecto relevante tiene que ver con la existencia de mayor oferta y demanda de la coca en muchos centros poblados cercanos “a los que acceden y disfrutan los pobladores involucrados en la cadena del narcotráfico”.
Por otro lado, la ONU señala a enclaves cada vez más productivos. El término “enclave”, hace referencia a esos lugares en los que hay mayor concentración de hectáreas de coca por kilómetro cuadrado, unos territorios en los que han permanecido estos cultivos por más de cuatro años y también en donde hay una presencia de todos los eslabones de la cadena productiva, entre otros factores.
El informe muestra que es en los enclaves donde se encuentran el 41% de los cultivos de coca.
Al mismo tiempo, hay unos factores estructurales en las dinámicas macro tanto a nivel nacional como internacional que propician el crecimiento de los cultivos. Esta vez, la ONU señaló cinco: las expectativas derivadas de los acuerdos de paz, la persistencia de vulnerabilidad territorial, el aumento en la demanda global, el aumento de los actores ilegales del narcotráfico y mayores incentivos para la producción de cocaína.
La fallida política prohibicionista del Gobierno Duque
Los datos del informe de la ONU apuntan que el cambio de rumbo de la política contra las drogas en el mandato de Iván Duque falló. El expresidente buscó priorizar la erradicación forzosa y defendió sin éxito las fumigaciones con glifosato.
En la presentación del informe, Candice Welsch, directora regional de la Unodc para la Región Andina y el Cono Sur, aseguró que la intervención de la erradicación forzosa fue efectiva solo en un periodo del mandato. Pero que existen unas «dificultades para sostener este tipo de mecanismos y la falta de medidas complementarias que logren cambiar las condiciones de vulnerabilidad».
Por su parte, Celis asegura que “esa política de persecución a la hoja de coca, es un permanente ir y venir. Mientras la gente no tenga alternativas, la coca va a ser una alternativa para la gente.”
Y va más allá: “Todavía hay un marco prohibicionista que hace que tenga una rentabilidad enorme. Mientras la política prohibicionista exista, la rentabilidad es enorme, porque el consume no disminuye, por el contrario, está aumentando”.
Para muchos, una de las más afectadas fue la sustitución voluntaria de cultivos ilícitos, que busca no solo disminuir el cultivo, sino también «promover proyectos para contribuir a la superación de las condiciones de pobreza y marginalidad de las familias su sustento de los cultivos ilícitos».
Geografía de los cultivos de coca en Colombia
Colombia es el mayor productor de coca a nivel mundial, pero dentro de su territorio se marcan unas fronteras dentro de las existe mayor o menor presencia de los cultivos. Así mismo, estas hablan de la falta de oportunidades en algunas partes del territorio y las asimetrías que siguen siendo presentes en el país entre el centro y ciertas zonas periféricas.
De hecho, el informe muestra que los cultivos de coca se siguen localizando en los mismos territorios con condiciones de vulnerabilidad.
Además, muestra que la inmensa mayoría de los municipios no se ven directamente afectados por estos cultivos. “De los 1.122 municipios 181 presentan afectación por coca, y en tan solo 12 se concentra la mitad de la coca”, muestra el informe.
El municipio de Tibú, al noreste del país, ocupa el primer lugar con cerca de 22.000 hectáreas.
Otro aspecto relevante es que 12 de los 14 enclaves se encuentran en departamentos fronterizos o con salida directa al mar. Esto hablaría de que “la concentración y permanencia de los cultivos de coca pueden ser explicadas por una relación geográfica funcional al tráfico”.
Las recomendaciones de la ONU
El informe de la ONU hace una serie de intervenciones y estrategias territoriales que podrían ayudar a disminuir el cultivo de coca en el país para los próximos años.
Una de estas es la promoción de intervenciones donde el cultivo de coca “tiende al abandono”, como en la “subregión Magdalena Medio y Occidente de Boyacá” y otros ocho departamentos que tienen menos de diez mil hectáreas. Según el organismo, se podrían “implementar este tipo de estrategias que aseguren la eliminación de forma sostenible.”
Al mismo tiempo, considerando las cifras sobre los cultivos de coca en zonas especiales, el informe recomienda “trabajar con los pueblos indígenas y las comunidades afrodescendientes en la comprensión de los impactos diferenciados que ocasiona el problema de las drogas desde un enfoque étnico y de derechos”.
También señala la necesidad de desarrollar diferentes componentes como el control de la oferta, el desarrollo rural, la seguridad, la inversión en infraestructura y servicios, y en “el monitoreo de las condiciones socioeconómicas de la implementación y el impacto exitoso de las intervenciones”. Todas estas serían unas bases para formar estrategias a largo plazo.
Por otro lado, reitera la necesidad de una articulación interinstitucional que abarque actores nacionales e internacionales, locales y nacionales, públicos y privados.
Un nuevo enfoque cargado de expectativas
Desde sus promesas de campaña, hasta su discurso de posesión y su primera intervención en la Asamblea General de Naciones Unidas; Petro ha sido enfático en la necesidad de cambiar la política antidrogas.
En la entrega del informe, el ministro de Justicia colombiano, Néstor Osuna, reafirmó este compromiso. “La política antidrogas del Gobierno Nacional va en otro sentido, va hacia aspectos de pacificación del territorio, trato no penal a los campesinos cultivadores de hoja de coca, sustitución de cultivos y promoción en la agenda internacional de la necesidad de un cambio de política de drogas», aseguró.
Al mismo tiempo, Petro ha señalado que debe llegar al fin de la guerra contra las drogas y ha pedido a los países más consumidores generar políticas de salud pública.
Para Celis, hay tres puntos en los que el nuevo presidente ya ha mostrado el cambio de enfoque. “Uno es el desarrollo rural, el cumplimiento del Acuerdo de Paz, del punto uno (reforma agraria)”, asegura.
Además, está la promoción de una discusión internacional en torno de la nueva política. “Todo parece indicar que el presidente se quiere ganar la región, América Latina y el Caribe, para ese debate”.
Y al mismo tiempo, un enfoque de salud pública nacionalmente. Una mirda que abarque el consumo desde otra perspectiva.
Con EFE y medios locales
Fuente: https://www.france24.com/es/am%C3%A9rica-latina/20221021-colombia-registra-m%C3%A1ximos-hist%C3%B3ricos-de-cultivos-de-hoja-de-coca-y-producci%C3%B3n-de-coca%C3%ADna-en-2021