REDACCIÓN EL INDEPENDIENTE
Con la finalidad de buscar la nulidad del tratado de Guadalupe Hidalgo de 1848, con el que México cedió más de de la mitad de su territorio a Estados Unidos, el ex candidato presidencial mexicano Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano y el abogado Guillermo Hamdan, presentaron una propuesta de demanda legal, anunció ayer el Chicago Tribune.
Desde el año, 2017, tanto Cárdenas y Hamdan encabezaron un encuentro en para lograr este objetivo que en 2023 ha tomado fuerza de nueva cuenta.
Lo anterior a fin de que se interponga una demanda ante la Corte Internacional de Justicia para que obligue al Gobierno de Estados Unidos a respetar los derechos internacionales.
Ambos consideraron que existen elementos suficientes para anular la validez de los acuerdos del Tratado de Guadalupe Hidalgo de 1848, incluyendo la confesional del ejército estadounidense de que invadió México.
“Vamos a hacer un litigio fuerte, duro, porque tenemos la razón. Estaban en territorio mexicano, en una invasión militar. Ese tratado de Guadalupe Hidalgo es nulo de pleno derecho; por lo tanto, los migrantes no pueden ser expulsados”, dijo Hamdan, citado por los medios.
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De esta forma, Hamdam aseguró que Estados Unidos se apropió de tierras que pertenecían a México a través de la invasión militar y por ello está impedido de expulsar a mexicanos, porque según el derecho internacional nadie puede ser expulsado de su tierra.
A través de esta demanda, se busca una sentencia favorable para México sobre los territorios despojados a México que actualmente son los estados de California, Nuevo México, Arizona, Nevada, Utah y partes de Colorado, Wyoming, Kansas y Oklahoma.
Afirmó que ante la imposibilidad práctica de recuperar el territorio anexado por el país vecino, se pediría a Estados Unidos pagar una indemnización por su uso en los últimos 168 años.
Para fortalecer lo ya mencionado, Cárdenas y Hamdan anunciaron que se lanzará una convocatoria para pedir a los mexicanos marchar hacia la residencia presidencial.
El abogado consideró que el presidente deberá manifestar su voluntad o no de presentar la demanda, porque es el único que podría tutelar el acto jurídico ante la Corte Internacional.