ARTURO SÁNCHEZ J. / EMIR OLIVARES / LA JORNADA
Ciudad de México. Para disminuir el costo al erario de nueve hospitales de los institutos Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) construidos bajo el esquema de asociaciones público-privadas con contratos que se concretaron durante los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, el gobierno federal buscará comprar los nosocomios a los concesionarios, pues este tipo de acuerdos han resultado “un robo”, declaró ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Lo que les vamos a proponer es que se los compramos, ya, hagamos un avalúo de lo que cuesta el edificio y los equipos”, mencionó el mandatario al criticar que en gobiernos anteriores se hayan hecho “buenos negocios para particulares, malos negocios para la nación”, y puso por ejemplo el Fobaproa, las prisiones y las autopistas concesionadas.
“Nada más de seis hospitales, que ni siquiera se utilizan completamente, tenemos que pagar a las empresas de servicio 6 mil millones de pesos al año”. Con ese monto “hacemos tres hospitales, tres, y es lo que pagamos en un año por seis. O sea, es un robo”, subrayó en su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
“Lo que es más abusivo quedaría corregido”, aseguró el tabasqueño, quien añadió que “todas esas asociaciones que se hicieron, público-privadas, todas esas concesiones han resultado un fiasco, pero además fueron instrumentos para robar”.
Aseguró que una de las recomendaciones que haría a quien lo sustituya en la Presidencia de la República en 2024 es que ya no se hagan concesiones de este tipo.
“Ojalá y no se repitan estas cosas hacia adelante, que ya no haya estos negocios privados al amparo del poder público, porque así no hay presupuesto que alcance”, y recomendó que los siguientes gobernantes “vean si es buen negocio para la nación, porque no estamos aquí para que se hagan jugosos negocios para particulares y malos negocios para la nación, para todos los mexicanos”.
Aseguró que su gobierno ha ahorrado un billón de pesos con medidas como combatir la evasión fiscal, el robo de combustibles, la firma de contratos leoninos y la austeridad.
El mandatario agregó que con el crecimiento económico y de población en el sureste que detonará el Tren Maya deben evitarse las concesiones de agua y destacó que su gobierno dejará alrededor de 25 planes de crecimiento urbano para municipios que cruzará el proyecto ferroviario.
“Va a crecer hacia adelante, por todos los recursos naturales que se tienen en esta zona. Nada más imagínense el turismo, es de las regiones más importantes en lo cultural y artístico del mundo, lo que es la nación maya, entonces va a haber mucho crecimiento”, sostuvo.