#PorSoleares | El Triángulo Rojo de Acatzingo, factor de riesgo para campañas y procesos electorales de Puebla
Por Jesús Manuel Hernández
Los acontecimientos en Acatzingo no encienden los focos amarillos, pasamos a “focos rojos”, la zona se ha venido convirtiendo en un espacio debatido por grupos organizados para delinquir y las autoridades deben saberlo, por supuesto que deben tener información.
Amozoc, Acatzingo, Quecholac, Palmar de Bravo, Tepeaca, Tecamachalco, forman lo que los policías y militares han denominado el “Triángulo Rojo”, una zona identificada los últimos años por el robo de gas, de combustible, el llamado “huachicol”.
Pero no es lo único, los últimos meses el índice de delincuencia ha crecido notablemente, en algunos casos pasa del 38 por ciento.
Por si fuera poco crece el número de personas desaparecidas y el asesinato de mujeres que por extrañas razones no se han clasificado en feminicidios.
Peor aún, varios de esos municipios están considerados por Coneval una zona donde 8 de cada 10 personas viven con extremas carencias.
El escenario se presentaba por sí mismo como un foco amarillo, pero ahora, al haber sido ejecutado el candidato de Morena a la Presidencia Municipal de Acatzingo, Jaime González Pérez, la zona pasó inmediatamente al semáforo rojo, hay alarma entre los políticos y los no políticos.
Y surgen preguntas: Si Alejandro Armenta Mier fue presidente municipal de Acatzingo entre 1993 y 1996, y luego diputado local y federal por esa zona, ¿sabía de la problemática de la región?
¿Era Jaime González el candidato de Armenta, fue producto de una negociación con Morena o de los políticos importados?
¿Afectará en algo el rumbo del proceso electoral, del inicio de campaña para gobernador?
Hace unos días trascendió que Armenta iniciaría campaña el 31 de marzo con Pepe Chedraui en la capital del Estado y se proponía visitar al menos 3 municipios por día, Acatzingo entre los primeros, donde forjó su capital político.
¿Acaso el asesinato de Jaime González constituye una advertencia, es un mensaje de la delincuencia a quien encabeza las preferencias electorales?
No se trató de un asalto al comerciante de autos conocido como “El Maicero”, fue una auténtica ejecución, luego entonces si esto sucede a una semana del inicio formal de las campañas por el Gobierno de Puebla, no debe dejarse de lado ni guardar el caso solo para la página de noticias rojas, por el contrario, constituye un factor más en la complicada vida electoral que viviremos por dos meses más, el Triángulo Rojo debe estar incluido en la Agenda de Riesgos de quien quiera gobernarnos.
O por lo menos, así me lo parece.