La obra maestra de Bach se estrenó por primera vez el Viernes Santo de 1724. Su composición es un llamado incomparable a una mayor humanidad.
Anastassia Boutsko / DW
Un hombre de 33 años está acusado de un delito. Es arrestado, torturado y muere en una cruz. Sus seres queridos, incluida su madre, se ven obligados a presenciar su tortura, sin poder intervenir. Un testigo describe personal y vívidamente el capítulo más oscuro de la historia del cristianismo, el evangelista Juan, amigo íntimo de la víctima.
Así se podría resumir el tema de la Pasión según San Juan, de Johann Sebastian Bach. La composición, junto con la Novena Sinfonía de Ludwig van Beethoven, es considerada por muchos como una de las mejores obras de música europea jamás escritas.
«Los temas atemporales hacen que esta obra sea tan actual y universal», dice Michael Maul, investigador de Bach y director del Festival Bach de Leipzig. «Amor y compasión. Lidiar con la traición, con el dolor. No es necesario ser un cristiano devoto, ni siquiera un luterano, para sentir eso», explica.
Semana Santa hace 300 años
Viernes Santo, 7 de abril de 1724. Fue la primera Semana Santa que Bach, de 39 años, pasó en Leipzig. Un año antes se había mudado a la ciudad sajona con su segunda esposa Anna Magdalena y los cuatro hijos de su primer matrimonio. Había asumido el cargo de «Thomaskantor», convirtiéndose en director de los 54 niños del coro de la iglesia de San Tomás. Fue un trabajo desafiante que no siempre fue gratificante.
Para los habitantes de Leipzig, Bach, que era conocido como el exmaestro de capilla de la cercana ciudad de Köthen, no era en absoluto su primera opción. «Si no puedes conseguir a uno de los mejores, no queda más que recurrir a alguien en el medio», fue un comentario decepcionado del ayuntamiento.
Pero Bach era ambicioso y estaba decidido a demostrar su valor presentando una nueva composición durante la Semana Santa, el evento musical central del año eclesiástico. Esta música de Viernes Santo se tocaba después del «tempus clausum», un período de abstinencia musical que dura todo el período de Cuaresma. Era la única época del año en la que el Thomaskantor podía aprovechar todas las fuerzas musicales de la ciudad, que por lo demás estaban repartidas en las cuatro iglesias principales de Leipzig.PUBLICIDAD
Las reacciones siguen siendo un misterio
Pero a pesar de la gran atención que Bach ha despertado en Leipzig a lo largo de los siglos, poco se sabe sobre cómo fue recibida su obra por el público de entonces. «Aún no hemos encontrado ningún testigo contemporáneo que realmente haya desentrañado y escrito lo que sentía ante esta obra maestra», afirma Maul. Y por supuesto, no hay grabaciones de audio. «De lo contrario, algunas cosas podrían sorprendernos: la estética sonora, los tempos».
Algunos oyentes pueden haberse sentido abrumados por la música dramática y a veces agresiva de Bach. También se puede suponer que la congregación estaba agotada cuando todo terminó. Con sermones y otros «interludios de textos», todo duró casi cinco horas.
La Pasión según San Juan y la actualidad
El Viernes Santo del 10 de abril de 2020, Leipzig se encontraba en medio de la pandemia de coronavirus. Una representación de la Pasión estaba fuera de discusión en cualquier parte del mundo. Sin embargo, el Festival Bach de Leipzig hizo historia al desarrollar un proyecto artístico único con un pequeño grupo de mentes creativas. A la hora de la muerte de Jesús, las 03:00 p.m., se interpretó una versión con música de cámara de la Pasión según San Juan ante la tumba de Bach, en la iglesia de San Tomás. Se transmitió en vivo y se invitó a la comunidad mundial de Bach a cantar. El video recibió millones de visitas.
La atención se centró en los creadores del proyecto: el percusionista Philipp Lamprecht, la clavecinista Elina Albach y el carismático tenor islandés Benedikt Kristjansson. También participó Steven Walter, director artístico del Beethovenfest Bonn, a quien se le ocurrió la idea de la Pasión como trío. Aunque la música de Bach a veces perdía su colorido en esta forma reducida, el mensaje de la Pasión se transmitía con mayor claridad.
La Pasión según San Juan contada de nuevo
Desde entonces, el exitoso proyecto se ha presentado más de 50 veces en diversos lugares. «Creo que la Pasión según San Juan sigue siendo una obra que incluso 300 años después de su estreno tiene mucho que decirnos y cada vez suena diferente», dijo Albach a DW. «En cada actuación, en cada concierto, tenemos la sensación de contar la historia de nuevo».
Lo mismo ocurrió durante la Semana Santa de 2022, cuando las imágenes de Bucha en Ucrania conmocionaron al mundo. «Ese día tocamos la Pasión según San Juan», recuerda Albach. «Y de repente, los recitativos y los textos de la crucifixión sonaron como reportes periodísticos o noticias que nos llegaban en vivo desde Ucrania por cable, por así decirlo».
(rr/dzc)