Los Periodistas

Ni humanos ni animales: así es la pirámide descubierta por los científicos cuyo origen se desconoce | El Confidencial

La pirámide más antigua del mundo podría estar en Indonesia y su origen ya ha sembrado discrepancias entre la comunidad científica

Gunung Padang, la pirámide megalítica de la provincia de Java occidental. (RaiyaniM/CC/Wikimedia)

Un nuevo descubrimiento en Gunung Padang, Indonesia, parece haber destronado a la pirámide de Zoser, construida en el año 2630 a.C. y considerada hasta la fecha la estructura más antigua del planeta. El nuevo hallazgo presenta una serie de elementos que llevan a los expertos a reevaluar los conocimientos arquitectónicos que hasta ahora se les habían atribuido a las civilizaciones antiguas.

La construcción es una pirámide en varias capas formada por una colina artificial con estructuras de piedra sobre ella, y bajo la cual hay túneles y cámaras subterráneas. La estructura reviste una sofisticación jamás vista anteriormente y, como era de esperar, todas las miradas de la comunidad científica se han posado sobre ella, bien para remarcar la importancia que supone a la hora de replantear el origen de nuestra civilización, bien para cuestionar su validez.

Foto: El Tesoro de Petra (Reuters -Stelios Misinas)

TE PUEDE INTERESARArqueólogos hallan un cáliz similar al ‘Santo Grial’ en una tumba oculta en Petra

Omar Kardoudi

La investigación, liderada por Danny Hilman Natawidjaja, del Centro de Investigación en Geotecnología del Instituto Indonesio de Ciencias, ha determinado que el núcleo de este yacimiento arqueológico podría contener lava que fue esculpida posteriormente con gran precisión mediante técnicas anteriores al desarrollo de la agricultura. Así, a través de la datación por radiocarbono, se determinó que las etapas iniciales de su construcción podrían remontarse a un período de entre 17.000 y 25.000 años, pudiendo haber tenido su fase inicial en el Paleolítico.

Los expertos descartan que el monte se haya formado de manera natural y señalan que su edificación piramidal, destinada previsiblemente al culto, pudo haber sufrido modificaciones posteriores. “Este yacimiento, junto con otros como Göbekli Tepe en Turquía, nos muestra que las sociedades preagrícolas tenían capacidades que hemos subestimado históricamente”, señalan los investigadores en su estudio, publicado en la revista Archaeological Prospection.

Revuelo en la comunidad científica

Desde otras instituciones no comparten el mismo entusiasmo, y Flint Dibble, de la Universidad de Cardiff, no encuentra evidencias claras de que las capas enterradas hayan sido manipuladas por humanos, considerando su formación fruto de procesos naturales. Por su parte, desde la Universidad Estatal del Sur de Connecticut, el profesor Bill Farley destaca la precisión con que han sido talladas las muestras obtenidas, no sin precisar que no presentan indicios de actividad humana.

Ante semejante escenario, la comunidad científica ya ha puesto en marcha numerosos estudios independientes con el objetivo de confirmar o refutar las conclusiones iniciales y desde la propia revista, el coeditor ha comunicado que se está realizando una investigación adicional sobre el artículo. Hilman Natawidjaja ha alentado a expertos de todo el mundo a universo a la investigación que está desarrollando en el yacimiento arqueológico, recordando que “la ciencia siempre debe estar dispuesta a ser cuestionada”. De confirmarse las conclusiones iniciales, nos encontraríamos ante un descubrimiento sin precedentes.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio