La salida de Sergio Pérez de Red Bull a finales del 2024 deja un camino difícil para su futuro inmediato, más no imposible de solucionar siempre que él quiera continuar.
Luis Ramírez / Motorsport
Luego de la separación de Sergio Pérez y Red Bull surge la gran duda de cuál será el destino del piloto mexicano en el deporte motor, un cuestionamiento que no será sencilla de despejar dado el momento en que se presenta el final de la relación entre ambas partes.
Si bien en un mundo ideal Red Bull pudo decidir no renovar a Checo Pérez a mediados de año y, así dejarle una oportunidad de encontrar un lugar en la parrilla para 2025, los hubiera no existen y ahora el latino se enfrenta a una situación donde no hay un solo lugar disponible para la próxima campaña.
El mensaje de Sergio Pérez en sus declaraciones en el comunicado tras su salida de Red Bull y en el de su video personal en redes sociales es claro, esto no es el final. “En lo personal, toca desacelerar por primera vez en mi vida, pero solo por unas cuantas curvas hasta que sepamos cuál es nuestro siguiente viaje”.
Simulador en un año clave pensando en 2026
Sin un asiento libre, la experiencia de Sergio Pérez como ganador de carreras y subcampeón del mundo (aunque los medios europeos pretenden minimizar esto) puede ser interesante para cualquier escudería, especialmente en un año donde necesitarán dos equipos: uno enfocado en la temporada 2025 y, otro, desarrollando el coche 2026.
La campaña 2026 marcará un nuevo rumbo en el diseño de los monoplazas, con una unidad de potencia con mayor carga en el sistema eléctrico, así como la aerodinámica móvil en el alerón delantero. Las escuderías no podrán iniciar el desarrollo de esos monoplazas hasta el 1 de enero de 2025, fecha en que podrán empezar con el trabajo de preparación.
El uso de simuladores para estudiar los efectos del diseño de los nuevos coches será un tema crítico. Si bien existen pilotos especializados en esta clase de herramientas, con aquellos egresados de los videojuegos creciendo rápidamente; la capacidad de un piloto con historial en grandes premios es un factor que puede volverlo atractivo, tal como es el caso de Sergio Pérez.
En este puesto las opciones son variadas. Mientras que las escuderías como Mercedes, McLaren y Red Bull tienen esas posiciones ocupadas, otros equipos como Alpine podrían acercarse a Checo Pérez para adquirir su experiencia, pero también recibir el apoyo económico de sus patrocinadores.
Ser parte de cualquier proyecto en el simulador mantendría al mexicano en activo, pero sobre todo, al corriente de la nueva reglamentación con vísperas a regresar en el 2026.
Para esa campaña actualmente hay opciones abiertas. Alpine tiene firmado a Pierre Gasly, pero no a su compañero para 2026. En Aston Martin Fernando Alonso está confirmado y, si bien Lance Stroll es el hijo del dueño la situación podría cambiar con la llegada de Honda como socio técnico y las exigencias de los accionistas de la firma automotriz por aprovechar a Adrian Newey.
Mercedes también tendrá abiertas las opciones oficiales, aunque se sabe del interés por conservar a George Russell y mantener a Andrea Kimi Antonelli.
Cadillac, un camino complicado
El nombre del equipo Cadillac, que deberá llegar a la parrilla en el 2026 como el equipo 11, también ha salido a la luz, pero no como una opción confirmada.
Por ahora, el proyecto de General Motors sigue armándose y, su inscripción al campeonato aún debe ser aprobada en su totalidad. Sin embargo, la compañía automotriz ha iniciado el proceso debido para intentar estar en un año en la parrilla.
Sergio Pérez, Red Bull Racing RB20
Photo by: Red Bull Content Pool
Cadillac empezará de cero con un motor Ferrari. La aún naciente escudería sigue reclutando personal, por lo que no comenzarán el desarrollo del nuevo coche a la par del resto de los equipos y eso se traducirá en una desventaja.
Pérez ha sido claro en diversas ocasiones que no pretende cerrar su carrera en un equipo donde no exista posibilidad de competitividad. Cadillac, al igual que muchas escuderías noveles, tendrá que pagar derecho de piso. Si bien el mexicano podría aportar experiencia, patrocinadores y fans, esto requerirá un alto grado de trabajo desde cero con resultados desconocidos.
El WEC y Ferrari una opción
En una reunión con medios previo al Gran Premio de Las Vegas, donde estuvo Motorsport.com, Checo Pérez dejó en claro que no competiría en IndyCar por el riesgo que conlleva, en especial las 500 Millas de Indianápolis, pero no descartaba las 24 Horas de Le Mans.
«Tengo mucho respeto por lo que hacen los pilotos en IndyCar. Al mismo tiempo, hay pilotos que no tienen mucha experiencia en la serie y competir a ese tipo velocidades, y tener ese tipo de impacto no es algo que estoy dispuesto a hacer una vez que termine mi carrera.
«Así que lo descartaré, pero mi objetivo será Le Mans», dijo el mexicano en aquel día.
Aunque no existe una comunicación oficial, fuentes cercanas al WEC han señalado que existen acercamientos entre Ferrari y Checo Pérez para analizar la posibilidad de competir en uno de los hypercars de la marca.
#51 Ferrari AF Corse Ferrari 499P: James Calado, Thomas Neubauer
Photo by: JEP / Motorsport Images
Ferrari ha sido el ganador de las dos últimas ediciones de las 24 Horas de Le Mans y, para 2025, lucen de nuevo como serios aspirantes. En Maranello confirmaron hace poco la alineación de sus dos hypercars: el número 50 con Antonio Fuoco, Nicklas Nielsen y Miguel Molina, mientras que en el 51 estarán James Calado, Alessandro Pier Guidi y Antonio Giovinazzi. A ellos se une el número 83, un coche “privado” donde están Phil Hanson, Yifei Ye y Robert Kubica.
Si bien los pilotos están confirmados existe un margen de maniobra que traería un doble juego para Checo Pérez: correr en el Campeonato Mundial de Resistencia, pero también convertirse en piloto de simulador y de reserva de Ferrari en la Fórmula 1.
Por ahora solo resta esperar a que Checo Pérez termine sus vacaciones y, en las primeras semanas del 2025, conocer su futuro, el cual incluso podría estar fuera de las pistas si las opciones presentadas no resultan atractivas.