Al final de la audiencia general, Francisco dirige su pensamiento a la «atormentada» población del país del este europeo, que vivirá meses difíciles debido a los cortes de luz y electricidad provocados por las incursiones rusas. El Papa insta a los jóvenes, empezando por los del Colegio Saint Michel des Batignolles de París sentados a su lado, a rezar por sus compañeros. Hace un llamamiento a la paz en Oriente Medio, donde «la gente sufre tanto» y anuncia la traducción al chino de la catequesis.
Salvatore Cernuzio – Ciudad del Vaticano / Vatican News
Ucrania, donde la población vivirá «un mal invierno». Tierra Santa, donde la gente «sufre tanto». Es todavía a estas dos tierras bañadas en la sangre de sus pueblos, donde -como dijo hace unos días- se experimenta «el fracaso de la humanidad», a las que el Papa Francisco dirige su pensamiento. Al final de la audiencia general, el Pontífice saluda a todos los fieles presentes en la plaza de San Pedro, su rostro sonriente se ensombrece cuando, antes de la bendición final, dirige su mirada a Ucrania, que se prepara para vivir un duro invierno a causa de los cortes de luz y la paralización de la red eléctrica por las incursiones rusas. Miles de personas sin electricidad ni calefacción, mientras que ya las primeras nevadas han azotado la capital, Kiev, y otras ciudades junto con olas de mal tiempo.
No olvidemos al atormentado pueblo ucraniano. Sufren tanto…
Una oración por los niños y jóvenes ucranianos
Francisco se dirige a los chicos sentados a su lado durante toda la audiencia. Son alumnos del Colegio Saint Michel des Batignolles de París, tienen entre 12 y 13 años y se preparan para la Confirmación. «Vosotros, chicos, pensad en los niños y jóvenes ucranianos que están sufriendo este tiempo sin calefacción con un invierno muy duro», les dice a ellos y a todos los jóvenes presentes en la plaza o conectados vía streaming.
Recen por los niños ucranianos, ¿quieren? ¿Quieren rezar? Todos ustedes no lo olviden
Paz en Tierra Santa
Con la misma aprensión, con la misma atención, el Papa Bergoglio pide oraciones por Tierra Santa, desde donde llegan destellos de esperanza tras el anuncio de Israel de una tregua con Hezbolá en Líbano. Aunque a ojos de muchos esto no parece un paso hacia la paz, ni un preludio del alto el fuego en Gaza. Por eso el Papa sigue insistiendo en rezar y rezar para que la paz vuelva a la Tierra de Jesús.
Y también rezamos por la paz en Tierra Santa, Nazaret, Palestina, Israel, para que haya paz, para que haya paz… La gente está sufriendo mucho. Recemos por la paz, todos juntos
La alegría del Evangelio en un mundo sumido en la tristeza
También en su saludo a los peregrinos polacos, el Papa había dirigido una invitación a todos los fieles, a ser «caritativos y artífices de paz apoyando a los que están enfermos y sufren a causa de las guerras, especialmente a los ucranianos para afrontar el invierno. Será un mal invierno para Ucrania», dijo. Una invitación que también expresó en su saludo a los fieles franceses: ‘En nuestro mundo inmerso en la tristeza de las guerras y las múltiples crisis, anunciemos la alegría del Evangelio a través de nuestras vidas transfiguradas por la presencia de Dios’.
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Traducción al chino de la catequesis de la Audiencia General
Y con visible alegría el Papa anunció que a partir de la próxima semana, antes del Adviento, llegará una novedad a la audiencia general: por primera vez habrá una traducción al chino de las catequesis. Una forma de hacer llegar la palabra del Obispo de Roma también a los fieles de lo que Francisco siempre ha llamado «un noble país».