La activista cree que todavía hay esperanza para su país, sobre todo con la nueva Administración en EEUU
Nuria López / Madrid / El Mundo
El empeño de la opositora cubana Rosa María Payá, hija de Oswaldo Payá y fundadora de la iniciativa Cuba Decide, no cesa. Su convicción es preparar el camino, con ayuda de la comunidad internacional, para que se celebre un plebiscito vinculante en Cuba, cambiar el sistema y comenzar así la transición. Una propuesta que ha llevado a la Administración estadounidense -la saliente y la entrante-, al Parlamento Europeo y a varios gobiernos de nuestro continente, entre ellos España, donde compareció esta semana en la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado.
Payá no sólo mantiene viva la llama de la esperanza en lo que respecta a su país, también ve una salida para Venezuela. Dos naciones cuyos destinos no sólo están unidos por la alianza de sus presidentes, también por el sufrimiento de sus ciudadanos. Un optimismo desde el que sigue denunciando la existencia de presos políticos y con un recuerdo especial para José Daniel Ferrer, de quien no se sabe nada desde abril de 2024. «Estamos hablando del líder más importante de la oposición dentro de la isla», insiste durante una entrevista en la que analiza el papel del Ejecutivo cubano en las diversas crisis abiertas en el mundo.
Pregunta. La guerra en Ucrania entra en una nueva escalada, ¿cómo afecta esto a Cuba como aliado y a los cubanos que están en el conflicto?
Respuesta. Los últimos números que tenemos, los que la prensa maneja, son entre 3.000 y 5.000 cubanos en el frente en Ucrania. Estos son datos también del Congreso ucraniano, que ya tienen más de un año, o sea que esos números pueden haber crecido. Es una tragedia para los cubanos, porque muchos de ellos son jóvenes que debido al hambre, a la miseria y a la represión van a Rusia con la esperanza de poder mandar 1.000 dólares a su casa. Otros son efectivos militares, represores de disidentes, que forman parte de los cuerpos militares de Cuba. El régimen cubano es el mejor aliado transatlántico de Putin. Es también su entrada a América Latina, su conexión con las otras dictaduras, donde también Putin tiene mucha influencia. No se entiende cómo Europa está apoyando a los ucranianos en esta agresión de parte de Rusia mientras la Unión Europea financia al aliado de Putin. Mientras mantiene un acuerdo de diálogo político y cooperación mediante el cual manda millones de euros de los contribuyentes europeos a los dictadores cubanos.
P. En nuestra última entrevista, decía que el pueblo se está muriendo de hambre. Hace poco había otra vez apagones, también el golpe del huracán… ¿Sigue la isla en esa deriva?
R. En mayo yo te hablaba de crisis humanitaria profunda. En este momento estamos viviendo condiciones de Estado fallido. El único requisito de Estado fallido que no cumple Cuba es que la dictadura militar tiene el monopolio de la fuerza y tiene el control territorial. Pero no tiene la capacidad o la voluntad de proveer servicios públicos esenciales. No tiene la capacidad, como se ha visto claramente, de proteger a la población contra desastres naturales. Durante el huracán anterior que pasó por Baracoa, en la zona más Oriental del país, muchos ni sabían que venía porque estaban a oscuras, no tenían electricidad.
Están cometiendo violaciones masivas de Derechos Humanos. El último dato de detenidos en su mayoría por manifestaciones es de 1.700. La situación es realmente de colapso. A todo esto la ciudadanía responde protestando y exigiendo libertad. Y eso se combina, yo creo que es la buena noticia, con una sociedad civil y con una oposición independiente que está unida en el Acuerdo por la Democracia, que deja muy claro cuáles son los puntos no negociables de un proceso de transición para el pueblo cubano, los puntos en los que todos coincidimos y a partir de esa plataforma nos coordinamos para decirle a Europa: ‘Basta de financiar al castrismo’.
Es hora de sancionar a estos criminales internacionales que no solamente cometen abusos de crímenes de lesa humanidad contra los cubanos, que los cometen también en Venezuela, que ayudan a Putin a cometerlos en Ucrania. Cuando nosotros le pedimos a España que sea consecuente, cuando nosotros le decimos a la Unión Europea que comience a actuar en apoyo al cambio democrático en Cuba, no le estamos pidiendo un ejercicio de altruismo. Le estamos pidiendo un ejercicio de autopreservación.
P. Pero tal y como veíamos en la reciente cumbre iberoamericana, España está perdiendo peso en América Latina…
R. Pues la manera de ganarlo es ser consecuente. España ha construido su irrelevancia a partir de su silencio cómplice con el régimen cubano, a partir de su tibieza con Nicolás Maduro.
P. Usted que reside en EEUU y como cubana, ¿qué supone para la isla la elección de Trump?
R. El anterior Gobierno del presidente Trump tomó medidas en solidaridad con el pueblo cubano, que nosotros agradecimos. Esperamos que sea mucho más estratégico en este momento y yo estoy convencida de que así será. Estamos felices con la designación del senador Marco Rubio como Secretario de Estado. Conoce en profundidad las amenazas globales que enfrenta Estados Unidos y conoce muy bien el rol que juega el régimen cubano en todas estas amenazas. Yo espero poder trabajar con el presidente Trump para apoyar al pueblo cubano a llegar a la libertad, porque la libertad del pueblo cubano es fundamental para la estabilidad democrática de América Latina y para la reconquista de la democracia en muchos lugares de nuestra región.
P. Otro aspecto de la nueva Administración Trump son las amenazas de las deportaciones. ¿Los cubanos que viven en Estados Unidos no tienen temor a esas expulsiones y los que están en la isla temor a no poder entrar en EEUU?
R. El pueblo cubano tiene la convicción de que para salir de la crisis hay que salir de la dictadura. Los cubanos que llegan a Estados Unidos tienen un camino claro hacia la regularización gracias a la Ley de Ajuste Cubano, que reconoce el carácter de refugiados políticos de todos los que escapan de la dictadura en Cuba. Esas son las leyes de la nación y yo espero que se respeten. Ahora, la manufactura de la crisis migratoria gigantesca que hemos visto en los últimos tres años, mediante la cual al menos 535.000 cubanos han cruzado la frontera sur de los Estados Unidos, según los datos de la guardia de frontera norteamericana, no pasó de casualidad. En noviembre del 2021 en Cuba estábamos en protestas masivas y en preparación de más. Ésta es la estrategia del régimen cubano para liberar presión interna y, por supuesto, Ortega es un discípulo del régimen cubano. Entre ellos se ponen de acuerdo, quitan la restricción de visa para los ciudadanos cubanos. A partir de ahí, es el pico migratorio, inmediatamente empiezan los vuelos La Habana-Managua, que han llegado a costar hasta 6.000 dólares el pasaje. Es un esquema de tráfico de seres humanos que empieza en La Habana y termina en El Paso. El esquema se probó exitoso porque no solamente es para liberar presión interna y para lucrarse con el sufrimiento de los exiliados cubanos, es también una manera de desestabilizar Centroamérica, Estados Unidos y de intentar conseguir concesiones de parte de la Administración. No es la primera vez que lo hace el régimen cubano. Las crisis migratorias manufacturadas por Fidel Castro son legendarias.
P. ¿Pero y los que viven en EEUU?
R. Bueno, yo tuve conversaciones muy duras con el Departamento de Estado durante estos años porque la Administración Biden empezó a deportar cubanos de estos que estaban entrando por la frontera y no estaban deportando a aquellos que nosotros les estábamos diciendo: ‘Son agentes del régimen cubano, son represores’.
P. ¿Estamos demasiado lejos de aquella imagen de Barack Obama visitando Cuba y la bandera de EEUU ondeando de nuevo en cielo cubano, lo que supuso un restablecimiento de las relaciones? Desde Europa se vio como un momento culmen…
R. A lo que Europa debería aspirar es a que la bandera cubana ondee libre en La Habana y no cuáles las acompañan en cada una de las embajadas. En ese momento de la visita estaban las detenciones arbitrarias por los cielos en mi país. Patrushev, el general ruso, aterriza cada vez que quiere. Esa bandera también ondea y puede hacerlo en paralelo.
P. ¿Cómo cree que va a afectar a Cuba la toma de posesión previsiblemente el 10 de enero de Maduro?
R. Yo creo que la ventana para el cambio en Venezuela continúa abierta y que lo que deberíamos estarnos preguntando todos en Occidente es cómo vamos a hacer para que sea Edmundo González Urrutia el que asuma el mando el 10 de enero.
P. ¿Y lo cree posible?
R. Absolutamente. ¿Cuál ha sido la consecuencia real que ha sufrido Maduro por el robo hasta ahora más escandaloso de las elecciones que se ha vivido en el último siglo? ¿España ya ha reconocido a Edmundo como presidente legítimo de Venezuela? Porque eso es lo que debería ser. Hablemos después que eso pase, ¿no? Hay que ver si Maduro aguanta eso. No se ha hecho lo que hay que hacer.
P. Justo este fin de semana veíamos excarcelaciones de presos políticos en Venezuela y se comparaba con lo que pasó en 2021 en Cuba. ¿Esa es una estrategia? ¿Está Maduro allanándose el terreno para esa toma de posesión?
R. Cada preso que se puede salvar es una victoria y eso lo sabe Maduro y juega con eso. Ésa ha sido la estrategia del Gobierno cubano desde el principio. Ustedes lo saben, ustedes recibieron aquí a a los 75 ex prisioneros políticos de la Primavera de Cuba, los líderes de Proyecto Varela. España fue parte de la estrategia del régimen cubano para expatriar a estos líderes ciudadanos cubanos. España debería saber qué significa esto y, junto con exigir de manera impostergable la liberación inmediata incondicional de los casi 2.000 prisioneros políticos que hay en Venezuela y en Cuba, debería redoblar la presión para que Edmundo González asuma el poder que le corresponda y no haya nunca más presos políticos en Venezuela.
Fuente: https://www.elmundo.es/internacional/2024/11/20/673ddf8be4d4d862088b4592.html