¿No se cansan de ver cómo atacan a las políticas poblanas en redes? ¡Yo sí!
Por Itandehui Rodríguez / Monólogos de Ménade
@Itandehui_RoMa / 21 agosto, 2024
He estado observando las últimas semanas el comportamiento de bots, tuiteros que sí revelan su identidad y que son los menos, y por supuesto, comunicadores. En la mayoría de los casos son hombres, que se convirtieron en escribas y fariseos modernos.
Los hay grandotes y los chiquitos, con y sin infuelcia, pero todos, violentos, sumamente violentos. El objeto del ataque son políticas que comenten un pecado en común: ejercer el derecho de vivir sus vidas.
Les critican por el contenido que generan o por su trayectoria, pero todas son víctimas del escarnio de hombres que en manada, deciden usar adjetivos que deberían guardarse para la autodescripción.
Deberían saber que cuando hablan de la manera en la que lo hacen, hablan más de ellos mismos que de las mujeres a las que intentan destruir.
Grace Palomares está guapísima, ¿el problema es que ninguno le llega a los talones? Claro, es que Grace es inalcanzable y ni modo.
Silvia Tanús es una gran política y maestra de muchos, ¿el problema es que ninguno le llega a los talones? Claro, es que Silvia es irrepetible y ni modo.
Nay Salvatori es muy ella y llena de “muchosidad”, ¿el problema es que ninguno le llega a los talones? Claro, es que Nay es inigualable y ni modo.
Podría hablar de más casos en los que los insultos son la forma y el fondo del mensaje, porque hay muchos, pero me genera bastante repulsión leerlos. Muchos poblanos están demostrando que pueden sorprendernos eternamente al superar sus niveles de misoginia y machismo.
Será esta sociedad cada vez más deconstruída, la que algún día les eche en cara lo que hacen hoy. Y tengan la certeza, los juzgarán con la misma crueldad.
Decidieron convertirse en escribas y fariseos y lanzar piedras para destruir a mujeres que les resultan incómodas.
Pero hasta yo, desde mi agnosticismo, sé que fue María Magdalena la que anunció la resurrección de Cristo y llegará el día en el que ese linchamiento que hoy emprenden, se les va a regresar.
Karma, le dicen.