La fundación FAES, que preside José María Aznar, señala que «ante el bochorno de ver a profesionales del embuste insistir en lo de ‘las mentiras de Aznar el 11-M», no guardan silencio para que no digan que quien calla otorga.
LUIS VILLAJOS / Agencias / EL ESPAÑOL
El veinte aniversario de los atentados del 11-M se ha visto enturbiado por la bronca política. PSOE y Sumar han acusado a José María Aznar de «mentir a los españoles» después de que la Fundación FAES lanzara un comunicado defendiendo la gestión del entonces presidente del Gobierno y negando que mintiera deliberadamente a los ciudadanos por cálculo electoral. Tras la ola de críticas de la izquierda, el PP ha arropado a su exlíder: «Hoy no es el día para que se dediquen a atacar a quien estaba en el Gobierno».
FAES ha lamentado este lunes que veinte años después del peor atentado en la historia de España prime «la manipulación mendaz sobre la crítica rigurosa» y niega que el entonces presidente del Gobierno, José María Aznar, mintiera deliberadamente a los ciudadanos por cálculo electoral.
En un análisis publicado en su página web, la Fundación que preside José María Aznar señala que «ante el bochorno de ver a profesionales del embuste, disfrazados de vestales, insistir en lo de ‘las mentiras de Aznar el 11-M», no guardan silencio para que nadie diga que quien calla otorga.
«Ni callamos hechos ciertos ni aceptamos mentiras reiteradas», afirma FAES, que critica que se quiera imputar al Gobierno del presidente Aznar una mentira deliberada «insistiendo en la autoría de ETA cuando -se dice- le constaba que la hipótesis yihadista era la correcta».
FAES rechaza esta acusación, según la cual «aquel Gobierno habría querido perpetrar un engaño masivo desconectando los atentados de la participación española en la intervención en Irak, causa de los mismos según esta narrativa, relato o, mejor, cuento».
Insiste la fundación en que «basta con repasar los diarios de sesiones, las investigaciones académicas posteriores, y las conclusiones a las que va llegando la crítica más solvente, para concluir que nunca se han demostrado los reproches calumniosos vertidos contra aquel Gobierno».
Reitera que el Ejecutivo de Aznar no ignoró ningún informe policial o de inteligencia que contradijese su actitud o su política de comunicación durante aquellas jornadas.
«Veinte años después, eso sí, debemos reconocer de rabiosa actualidad una de las consignas acuñadas aquel marzo negro por la izquierda. Conformes: hoy, más que nunca, «los españoles se merecen un gobierno que no les mienta», concluye el análisis de FAES.
PSOE y Sumar cargan contra Aznar
La reacción de los partidos que conforman el Gobierno de coalición al comunicado de FAES no se ha hecho esperar. El PSOE ha reclamado al PP que pida perdón a los españoles por «mentir» sobre la autoría de los atentados del 11-M.
El secretario del Área Institucional y Grandes Ciudades del PSOE y vicepresidente del Congreso, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, ha expresado su «dolor profundo» y su recuerdo a las víctimas de los atentados, y ha criticado la actitud que tuvo en ese momento el PP y el Gobierno de Aznar, al asegurar que «antepuso los intereses electorales al respeto y la verdad», algo que considera que es el «modus operandi del PP de siempre».
Según Rodríguez Gómez de Celis, el PP cometió entonces «la mayor infamia y la mayor mentira de un Gobierno», al internar hacer creer a la población que el autor de los atentados había sido ETA, y lo hizo además «jugando con el miedo de todos los españoles».
Asimismo, ha reprochado a la Fundación FAES que también continúe «sin pedir perdón», y ha insistido en que «el PP de hoy sigue actuando con el mismo patrón» del PP de hace 20 años, al querer en la actualidad «obtener el Gobierno caiga quien caiga, aunque quienes caigan sean los ciudadanos».
En la misma línea, el portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, ha exigido a Aznar y al PP que dejen de poner excusas sobre el 11-M y se disculpen ya «por todas las mentiras flagrantes» que dijeron sobre el peor atentado terrorista que ha sufrido Europa. «Todavía deben una disculpa a la sociedad española», ha insistido Urtasun.
Precisamente este lunes, el portavoz de Sumar, Íñigo Errejón, ha registrado en el Congreso una proposición no de ley relativa a la conmemoración de los 20 años del atentado terrorista del 11-M para su debate en la Comisión Constitucional.
En la exposición de motivos, la proposición no de ley afirma que el atentado yihadista fue «más que una masacre, puso a prueba la democracia española» y subraya que tras la victoria electoral del 14 de marzo del PSOE «se desató una teoría de conspiración para deslegitimar los resultados electorales».
Y estas acciones de deslegitimación, dice la iniciativa de Sumar, «llevaron al cuestionamiento de jueces, fiscales, policías y periodistas, que se vieron atacados personal y profesionalmente». «Polarización y desinformación que contaminaron el juicio, celebrado entre febrero y julio de 2007», añade.
Génova arropa a Aznar
Ante los ataques de la izquierda, la dirección del PP ha salido a arropar al entonces jefe del Ejecutivo y expresidente de su partido. En rueda de prensa, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha asegurado este lunes que este 11 de marzo, en el que se cumplen 20 años de los atentados en Madrid, no es el día de «atacar» a quien estaba al frente del Gobierno de España.
Tras mandar un mensaje de apoyo a las víctimas y agradecer la labor del personal que ayudó entonces, la número tres’ del PP ha rehusado extenderse en más detalles cuando se le ha preguntado expresamente por la gestión de la información que hizo en aquellos días el Gobierno del PP.
«Hoy es un día muy duro para la sociedad española y para la democracia española. Y, por lo tanto, comparto absolutamente que hoy no es el día para que se dediquen a atacar a quien en aquel momento estaba al frente del Gobierno de España y, con ello, a todos aquellos que tuvieron que afrontar esos días», ha afirmado Gamarra.
Por su parte, el alcalce de la capital, José Luis Martínez-Almeida, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, han evitado pronunciarse sobre la gestión que hizo el Gobierno del PP tras los atentados yihadistas. La presidenta madrileña se ha limitado a señalar que «no es el día de dar un titular por otra cosa que no sea apoyar a las víctimas».