La empresa Tren Maya S.A. de C.V., que administra la Sedena, completó la formación de 20 maquinistas, que fueron capacitados en Europa; además se formaron 72 operadores de equipo especializado, garroteros de camino y garroteros de patio, entre otros.
ARTURO ROJAS / JESÚS VÁZQUEZ / EL ECONOMISTA
Las autoridades del Gobierno federal reconocieron que el viaje inicial del Tren Maya se trató de una preapertura y se aceptó una falla, el pasado viernes 15 de diciembre, que provocó retrasos de más de cuatro horas.
En un video de redes sociales, un hombre con megáfono anunció a usuarios, que esperaban para abordar el Tren Maya, que el retraso se debió a una falla técnica de la empresa Alstom.
“Es importante dejar claro que este problema, este problema de retraso, se originó por una falla técnica de Alstom, que es la empresa que nos provee del Tren Maya. Nosotros, la empresa Tren Maya, no es responsable de esta avería; sin embargo, les pedimos una disculpa”, se escucha en el video.
Medios locales informaron que, el viaje programado para partir a las 11:00 horas, desde Cancún, a San Francisco, Campeche, sufrió de una demora de cuatro horas y media, pues salió a las 15:30 horas.
Por su parte, se dio a conocer que el viaje que inició recorrido en Campeche, alrededor de las 7:00 horas, arribó hasta las 17:30 horas a Cancún, tras dos paradas que se realizaron de manera obligatoria.
En declaraciones con medios, Óscar David Lozano, director general de Tren Maya, S.A. de C.V., afirmó que las fallas presentadas eran normales y que la operación de la empresa no era al 100%, pues recordó que él comentó que se trataría de una preapertura. Además, consideró que sería cuestión de tiempo para que se solucionen este tipo de detalles.
Además, durante la conferencia de prensa matutina del pasado viernes, previo al recorrido inaugural, encabezado por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, Lozano Águila dio cuenta que este viaje se trataba de una preapertura del servicio de pasajeros, desde la estación de San Francisco de Campeche, a Cancún, con un total de 473 kilómetros de infraestructura ferroviaria.
“El día de hoy damos cuenta de la conclusión de la primera etapa de este gran proyecto para iniciar la preapertura del servicio de transporte de pasajeros desde este lugar, la gran estación de San Francisco de Campeche, y que nos permitirá conocer la primera ruta del Tren Maya hasta la estación Cancún Aeropuerto, recorriendo, como ya lo señaló nuestro presidente, 473 kilómetros de infraestructura ferroviaria”, detalló el director general de la empresa.
Óscar David Lozano explicó que, en el tramo inaugurado, existen 14 estaciones; dos cocheras (una en Teya, Yucatán y otra en Hampolol, Campeche); dos bases de mantenimiento (en Teya y Valladolid, Yucatán); un taller y una cochera, en Cancún; 187 obras de drenaje transversal; 362 pasos vehiculares, generales, peatonales y de fauna, que generó más de 100,000 empleos.
“Cada estación, como esta en la que están aquí, cuenta con accesos amplios, vestíbulos, taquillas, locales comerciales, espacios de esparcimiento, baños, áreas administrativas, amplios estacionamientos, andenes. Y su diseño, sobre todo, armoniza con los paisajes. Y en su construcción se emplearon piedras y canteras, así como mano de obra, materiales y acabados de la región”, dijo en la conferencia de prensa matutina.
Primera fase, menos de un tercio
Con los 473 kilómetros que conforman la primera etapa inaugurada por el presidente de México, se recorrieron tan sólo 30.43% de los 1,554 kilómetros que conformarán el Tren Maya y que pasará por los estados de Chiapas, Campeche, Tabasco, Yucatán y Quintana Roo.
Una segunda fase se inaugurará el próximo 30 de diciembre y la tercera y última será abierta el 29 de febrero del 2024, informó la Presidencia de la República.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, detalló, el pasado viernes, que el tren se trató de una gran obra de la ingeniería civil y ferroviaria, pero destacó a los 100,000 trabajadores de la construcción de todo el país que participaron en la obra. Además, reconoció que la obra no habría podido realizarse sin el apoyo de los ingenieros militares.
“No hubiésemos podido concluir esta obra sin el apoyo de los ingenieros militares de la Secretaría de la Defensa, ellos han sido fundamentales; no hay excusas, no hay pretextos y cumplen sus tareas”, dijo López Obrador.
El jefe del Ejecutivo consideró que el costo del Tren Maya fue una inversión pública y que no se contaba con una deuda por la obra y que, en su debido momento, aunque sin aclarar la fecha, se darían a conocer los costos.
“Y vamos a informar en su momento sobre la inversión, que no se gastó, porque también no hay una obra así con estos costos en el mundo. Y también decir que no fue crédito, que fue inversión pública. No se debe nada del Tren Maya, nada. Esta es una obra del pueblo de México y por eso la vamos a cuidar todos, es una obra de todos los mexicanos para ayudar mucho al desarrollo del sureste (del país)”, afirmó el presidente.
Cuestionado durante el recorrido del primer convoy del Tren Maya sobre el costo de la obra, López Obrador dijo que no tenía el dato exacto, pero afirmó que estaba entre 200 mil y 300 mil millones de pesos. Y recordó que durante los primeros años de operación no se pagará el mantenimiento, pues lo pagarán las empresas constructoras, ya que así se pactó en los contratos de obra.
Se mantiene en obra negra
Con retrasos, arranca Estación Cancún-Aeropuerto
La estación del Tren Maya Cancún-Aeropuerto tuvo un accidentado primer día de operaciones el viernes pasado, con retraso de 45 minutos en la llegada y salida de la primera corrida de las 7 de la mañana y de más de cuatro horas y media en la de las 11.
Un representante de la empresa Tren Maya salió a comunicar poco antes de las 15.30 horas del viernes, con megáfono en mano, que el retraso era culpa de Alstom, la empresa encargada de la construcción de los trenes.
“Este problema de retraso se debe a una falla técnica de Alstom. La empresa Tren Maya no es responsable. Les ofrecemos una disculpa, agradecemos su comprensión. Esta experiencia no representa al Tren Maya”.
La corrida que debió partir de Cancún en punto de las 11 de la mañana, finalmente fue despachada poco antes de las 16:00 horas.
Aunado a ello, las obras aún en marcha hicieron tortuoso el ingreso a la estación, cuya entrada de terracería es la misma para los viajeros que para los camiones de volteo y demás maquinaria por tratarse de una zona en obras.
De igual manera, la estación desde la que se pretende captar los más de 20 millones de turistas que visitan Cancún al año no tiene baños. En lugar de ello se han colocado dos sanitarios móviles de la marca Sanmex, que darán servicio en tanto se habilita el servicio de agua y drenaje.
Tampoco está listo el autobús eléctrico que trasladará a los pasajeros del aeropuerto de Cancún hasta la terminal ferroviaria; en lugar dos autobuses de pasajeros realizan dos viajes entre ambas terminales al día.
Aunque en los reportes semanales del progreso de la obra se asegura que la terminal de Cancún tiene 85% de avance, en los hechos no parece así, pues hay amplias zonas aún con accesos de terracería y movimiento permanente de maquinaria y trabajadores.
El último reporte de avance de obra de los tramos que se inauguran arrojó que el Tramo 2, de 234 kilómetros entre Calkiní e Izamal, sí tiene ya al 100% la vía concluida, pero las estaciones aún a 80 por ciento.
El Tramo 3 de Calkiní-Izamal, con 159 kilómetros de vía, reportaba 99% de estructuras colocadas; pasos vehiculares a 96%; vía férrea 100% colocada, pero con un faltante de 10% de los aparatos de vía por colocar.
El Tramo 4 de Izamal a Cancún es el que presenta más retraso, pues aunque la vía se encuentra a 100%, la estación de Chichen Itzá reporta avance de apenas 8%.