- El cantante no ha presentado denuncia formal por el atraco a su vivienda de México, por parte de 10 encapuchados, ni permite la entrada a los investigadores
- Un experto en seguridad internacional explica el motivo de peso del artista para dar el tema por zanjado. La Fiscalía tendría dificultad para actuar de oficio
- Se filtran las imágenes de los presuntos atracadores, saliendo de la casa con bolsas y en el coche del artista. ¿Cómo pudieron blindar el sistema de seguridad?
MIREYA MARRÓN / NIUS
Este martes se han conocido más datos sobre el atraco «de película» que Miguel Bosé sufrió en su casa de México el pasado viernes 18 de agosto, cuando diez encapuchados armados irrumpieron en la vivienda, maniatando a él, sus dos hijos y el personal de servicio durante dos horas, tal y como relató el propio cantante, y llevándose joyas, una importante cantidad de dinero y una furgoneta en la que huyeron, junto al chófer del cantante, presuntamente amenazado, tal y como muestran las imágenes de las cámaras de seguridad que difunden medios mexicanos, donde también se ve a cuatro de los atracadores saliendo de la casa con bolsa
Se filtran las imágenes de los presuntos atracadores de la casa de Miguel Bosé en México
La Fiscalía ya ha notificado el hallazgo de la camioneta robada para huir, mientras que el conductor fue abandonado en una zona cercana.
¿Dónde vive Miguel Bosé?
Un suceso rodeado aún de muchos interrogantes. Cómo pudieron los asaltantes vulnerar el férreo sistema de seguridad de la urbanización de lujo (El Rancho San Francisco) en la que reside Bosé en Ciudad de México.
Este es el exclusivo residencial Rancho San Francisco en la #CDMX, donde un comando amagó y asaltó al cantante Miguel Bosé durante dos horas. Los asaltantes entraron y salieron de la casa sin que ninguno de los más de 30 elementos de seguridad lo impidieran. pic.twitter.com/dnubWDuliZ— Ciro Gómez Leyva (@CiroGomezL) 22 de agosto de 2023
Y lo más llamativo, por qué el artista no ha presentado denuncia formal, a pesar de los 3,5 millones de dólares (3,2 millones de euros) que le robaron, según ha trascendido en medios aztecas, y la dificultad que estaría poniendo a los investigadores para que lleven a cabo sus pesquisas.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México ha informado que se ha abierto una carpeta de investigación, aunque “hasta el momento ni la víctima y/o su representante legal, ni la administración del conjunto residencial donde ocurrieron los hechos, se han presentado a esta Fiscalía a denunciar el delito», asegura la instancia en un comunicado.
Además, la Fiscalía añade que agentes de la alcaldía de Álvaro Obregón, donde vive Bosé, acudieron al lugar de los hechos, pero no se les permitió el acceso a la vivienda.
«Esta mañana, se entabló conversación con la administradora de la urbanización, quien mencionó que el afectado no se encontraba en el domicilio y que no era deseo de ella dar ningún tipo de entrevista relacionada con los hechos», ha comunicado la FGJ-CDMX, que ha invitado a Bosé a presentar una «denuncia formal» por el hecho delictivo, que aún no se ha producido.Es habitual que las bandas amenacen a las víctimas con volver a su casa si denuncian
¿Por qué no ha denunciado Miguel Bosé el hecho delictivo?
Una pregunta que hoy respondían varios expertos consultados en las tertulias de televisión que analizan el tema. José Félix Ramajo, especialista en seguridad internacional, tiene claro, por su experiencia, que el motivo por el que el cantante prefiere dar el tema por zanjado y no denunciar es el «miedo» a represalias de los asaltantes. “Es muy habitual en robos de bandas especializadas de este tipo, que amenacen a las víctimas con volver a su casa y hacer daño a él o su familia si denuncian”, ha dicho este experto en declaraciones al programa Así es la vida (Telecinco). Una teoría, la del «miedo», que comparte el periodista Juan Luis Galiacho (Cuatro al día).
Esto explicaría que el cantante no quisiera dar detalles concretos de lo sucedido en su casa, más allá de confirmar la noticia en sus redes sociales, asegurando que fue «todo muy tenso, delicado y desagradable», o que hubiera tardado en avisar a su ex, Nacho Palau, o sus hermanas del dramático suceso, del que al parecer se enteraron primeramente por la prensa.
¿Cómo pudieron los asaltantes blindar su sistema de seguridad?
El músico de 67 años explicó en Instagram que había sido un asalto «muy estudiado y milimetrado». A este respecto, todo apunta -y así lo cree también Ramajo-, que un robo de este calibre, donde los asaltantes escalaron un barranco de 30 metros sin ser advertidos y consiguieron desactivar el sistema de seguridad, solo pudo producirse con ayuda de alguien del equipo de seguridad de la urbanización o de la casa de Bosé.
En México esto sucede a menudo, y «no hace falta que la persona que dé el chivatazo o se preste a ayudar a los ladrones sea un delincuente o una persona corrupta, basta con que esté amenazado”. El experto cree que los asaltantes debían tener información del dinero que había en la casa porque “nadie irrumpe en una casa de esa forma sin saber lo que van a encontrar dentro”. «Es lo que se denomina un salto, alguien que conoce y la casa y la hora en la que hay que actuar», añadió el periodista Alfonso Egea en El programa del verano.
El periodista mexicano Gustavo Adolfo Infante cree que “al tratarse de un robo, sin homicidio de por medio, y no haber denuncia de la víctima, la Fiscalía no puede actuar de oficio, de forma que si Bosé no denuncia, no habrá manera de que el delito pueda ser perseguido”, ha dicho en el programa Y ahora verano de Antena 3.
Para el cantante, que aún se está reponiendo del susto vivido con sus hijos -Diego y Mateo, de 11 años-, “sería un dolor de cabeza tener que someterse ahora a todo tipo de preguntas y ruedas de reconocimiento, sobre todo si es cierto que podría estar amenazado por una banda que no sabemos si es peligrosa”, explica Ramajo en Telecinco sobre el aparente «bloqueo» de Bosé de cara a presentar una denuncia formal.
Todo «este asunto le ha alterado tanto que ha perdido la poca voz que le quedaba”, añade Infante sobre los conocidos problemas de afonía del autor de Amante Bandido y coach de La Voz México, que se habrían visto agravados tras este fuerte impacto emocional.