El cantante mexicano arrancó este jueves su gira musical, con la recorrerá Latinoamérica y Estados Unidos.
AGENCIAS / CHIC
Luis Miguel ha vuelto a cantar en directo tras cuatro años alejado de los escenarios y lo ha hecho por todo lo alto y con la presencia entre el público, como no podía ser de otra manera, de Paloma Cuevas. Coincidiendo con su primer aniversario de relación y después de disfrutar de unas románticas vacaciones en México con paradas en Nueva York y Los Ángeles, la enamoradísima pareja puso rumbo a Argentina, país elegido por el Rey sol para arrancar este jueves la extensa gira -con 45 conciertos previstos- con la que recorrerá Latinoamérica y Estados Unidos durante los próximos cuatro meses.
A su llegada a Buenos Aires intentaron pasar desapercibidos e hicieron todo lo posible para que no se captasen imágenes de su estancia en la ciudad porteña. Allí están acompañados por una de las hijas de Paloma y se alojan en una exclusiva suite de 11.000 euros la noche. Sin embargo, a pesar de su continua discreción, el cantante cambió de actitud durante su show y no dudó en confesar públicamente, y ante miles de seguidores, lo enamorado que está de la exmujer de Enrique Ponce.
La romántica cena de Paloma Cuevas y Luis Miguel en MéxicoCarlos Pérez Gimeno
Y qué mejor manera que hacerlo con un guiño muy especial en una de sus canciones más populares, Currucucú Paloma, que modificó para dedicársela a su novia, repitiendo en varias ocasiones su nombre a capella visiblemente emocionado y sin dejar de mirar al sector del estadio en el que se encontraba la diseñadora.
Un momentazo que enloqueció a sus fans, que consideran que Paloma es la responsable del gran momento que atraviesa Luis Miguel, que más en forma que nunca derrochó voz y entrega en un espectacular primer concierto de su gira que ha superado con creces todas las expectativas previstas.