La SER presencia el momento en que varios agentes suben a un autobús con migrantes de Haití y Venezuela y les exigen dinero a cambio de dejarles seguir su camino hacia México
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CADENA SER
Madrid
La Cadena SER está en la ruta de migrantes que quiere llegar a la frontera entre México y Estados Unidos, donde este viernes ha decaído la norma de Trump que permitía las devoluciones en caliente. En un momento de ese trayecto agentes de la policía de Guatemala han aprovechado para extorsionar a las personas que intentan cruzar esa frontera. Lo ha vivido en primera persona el colaborador de la SER Asier Vera en uno de los autobuses donde las familias siguen las rutas migratorias.
Varios agentes de la Policía Nacional Civil se han subido a un vehículo con migrantes procedentes de Haití y Venezuela para extorsionarles a cambio de dejarles continuar su camino hacia México. El incidente se ha producido a escasos metros de la entrada al municipio guatemalteco de Tecún Umán, donde se halla el río Suchiate que separa Guatemala y México.
Dos agentes subieron al autobús en plena noche y, tras pedir la documentación a los viajeros, les obligaron a bajar, reunieron a los migrantes y les exigieron dinero: «Quien no quiera colaborar, que agarre su mochila y se queda aquí». Inmediatamente, los migrantes han comenzado a darles distintas cantidades de dinero para poder proseguir su viaje hacia Estados Unidos.
Actuando como asaltantes, los agentes han llegado en algún caso a revisar la cartera para sacar de ella 1.400 quetzales (la moneda de Guatemala), unos 170 euros al cambio, y los bolsillos en busca de otros objetos como un teléfono móvil.
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Fin de la norma que permitía expulsar en caliente
Estos incidentes en la peligrosa ruta migratoria americana se producen el mismo día que el controvertido Título 42, la norma que en Estados Unidos permitía la expulsión en caliente de migrantes por motivos de salud pública, ha llegado a su fin.
Impuesto durante la Administración del expresidente Donald Trump (2017-2021), alabado por republicanos, denostado por activistas de los derechos humanos y mantenido por el Gobierno del demócrata Joe Biden, pese a las críticas de su propio partido, su levantamiento ha desatado rumores y una nueva batalla política entre progresistas y conservadores.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) acaba de lanzar una campaña publicitaria para persuadir a los migrantes latinoamericanos que huyen de sus países de que no entren en Estados Unidos. «No hagas caso a lo que dicen los contrabandistas: infórmate sobre el sistema de inmigración de EE.UU.», asegura un mensaje del DHS en su página de Twitter.
Este departamento de seguridad precisó que la campaña se llevará a cabo en países como Honduras, El Salvador, Guatemala, Ecuador y Colombia, y también se difundirán los mensajes «a lo largo de la ruta migratoria y en las plataformas de redes sociales más populares entre los migrantes».
«El coyote (contrabandista de personas) nos estafó. Entrar ilegalmente en EEUU es un delito. Dígale no al coyote», se puede leer en español en un texto escrito en rojo y blanco sobre una imagen de una familia de migrantes de espaldas con dos hijos, y que forma parte de esta campaña. Sobre otra fotografía, pero esta vez de una patrulla fronteriza, está impresa la frase: «Las leyes migratorias de Estados Unidos siguen vigentes. Cruzar ilegalmente es un delito».