El Obispo hondureño, monseñor José Antonio Canales, secretario del Secretariado del Episcopado de América Central pide a las autoridades de Nicaragua: “rectifiquen del camino erróneo”. Manifiesta su preocupación el Obispo Rolando Álvarez y el aumento de los migrantes nicaragüenses en la frontera.
JOHAN PACHECO / VATICAN NEWS
Los obispos de América Central cercanos a la Iglesia en Nicaragua, expresan su solidaridad con los pastores y fieles, de manera especial con el Obispo encarcelado de Matagalpa, condenado a 26 años de prisión. El secretario general del Secretariado Episcopal de América Central (Sedac), monseñor José Antonio Canales -Obispo de la diócesis de Danlí en Honduras-, manifiesta su preocupación pastoral por los hermanos nicaragüenses.
“Lamentamos mucho el secuestro porque en realidad fue un secuestro del obispo y pues lo hemos sentido con mucho pesar en todo Centroamérica y, más nosotros aquí en Honduras y mi diócesis que es fronteriza con Nicaragua”, expresa el Obispo hondureño a Vatican News.
El llamado: rectifiquen del camino erróneo
El secretario general del Sedac refiere que el llamado a las autoridades es a rectificar:
“El llamado de Sedac es para que estás autoridades de Nicaragua rectifiquen del camino erróneo en que han llevado a este país y precisamente contra la Iglesia, porque no quieren oposición, no aceptan ninguna crítica, no aceptan ninguna voz que sea contraria a lo que él hace y dice. Entonces, la Iglesia católica en Nicaragua es la única voz que no han podido callar, pero que pretenden callarla y dejar pues a la Iglesia sumergida en el silencio”
Y anima también el Prelado a la Iglesia en Nicaragua a mantener la confianza en el Dios: “invito a no desmayar, a mantener el ánimo en alto, y que la Iglesia pueda, aun con todas las dificultades y trabas que le han puesto estas autoridades, continuar adelante con su misión evangelizadora”, dijo Canales.
Aumenta la migración de nicaragüense
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El Obispo de la Diócesis de Danlí, en la frontera entre Honduras y Nicaragua, también informa del aumento de los migrantes nicaragüenses en las últimas semanas: “Nosotros al principio recibíamos migrantes venezolanos, haitianos y cubanos que era la gran mayoría de los que cruzaban el territorio de nuestra diócesis de Danlí, y tristemente ya también se ha sumado un fuerte contingente nicaragüense, que por cierto era un país de Centroamérica que pocos migrantes emitía, pero ya con esta situación tan dura de persecución”, dijo.
“Nosotros aquí pues ayudando a todos los migrantes que entran independientemente de la nacionalidad, pero sí lamentablemente hemos visto que los nicaragüenses son ahora también otro fuerte contingente cruzando el territorio de nuestra diócesis”
Finalmente, el secretario general del Sedac agradeció la valentía de monseñor Rolando Álvarez de seguir junto a su pueblo en esas circunstancias. Y manifestó su preocupación por el trato inhumano que pueda recibir en la cárcel.
“Mi preocupación es que puedan darle un trato tan inhumano que lo hagan colapsar, y ya se lo había manifestado a mis hermanos obispos de las conferencias de Centroamérica, mi preocupación por el trato que pueda recibir el obispo y que en este momento que estoy hablando esté sufriendo para hacerlo desistir de su postura y menguar su ánimo, estoy muy preocupado”