Este viernes debuta en Montmeló quien en su día fue fichado por McLaren para seguir la estela de Lewis, tapado luego en su carrera por Lando y Max en Holanda
JAVIER RUBIO / Montmeló / EL CONFIDENCIAL
El pasado domingo, Nick de Vries ganó la segunda carrera de la Fórmula E en Berlín. Muchos no conocerán su rostro, pero se le ve frecuentemente junto a Toto Wolff en el garaje de Mercedes, ya que ejerce también como piloto reserva del equipo alemán. Cuando la entrevistadora le hizo otra pregunta, el holandés se emocionó. Es el campeón en vigor de la Fórmula E, título que logró el pasado año con Mercedes. En las últimas cuatro carreras sólo había logrado dos puntos. La presión era extrema y su victoria casi le hizo entrar en lágrimas, en directo. Una semana después va a lograr su gran sueño frustrado hasta ahora: participar en un gran premio, aunque de momento solo sea en la primera sesión de libres. Es también candidato a ser piloto oficial de Williams el próximo año.
De Vries rodará en una sesión de gran premio por primera vez con… 27 años. Una edad tardía para quien en su día estaba destinado a ser el próximo Hamilton. Cuando era un niño, fue fichado por el británico como su posible heredero. De hecho, su carrera era tutelada por Anthony, el padre de Lewis. Su impresionante trayectoria en el ‘karting’ le señalaban como un claro aspirante a la Fórmula 1 cuando solo tenía 14 años. Por eso McLaren le cazó a esa edad.
La historia hacia la Fórmula 1, sin embargo, se escribe en muchas ocasiones con renglones torcidos, como ha sido el caso de De Vries. Para colmo, tuvo la mala fortuna de que en su trayectoria se cruzaran dos fenómenos para impedir el ascenso a la máxima categoría: Lando Norris y Max Verstappen.
No tan rápido
De Vries, cuando era niño, subió al podio en los karts y las imágenes impactaron. Un crío diminuto entre adolescentes. Carlos Sainz estuvo en uno de esos podios, y sacaba medio cuerpo al holandés. De los 12 a los 15 años era la estrella del ‘karting’ mundial. Campeón en el WSK World Series en la categoría KF3, campeón alemán junior, repitió al año siguiente con sólo 14 años. En 2010 y en 2011 fue campeón absoluto del mundo. Consciente de que podría ser el siguiente Hamilton por su carrera, el padre del británico lo llevó a McLaren mientras tuteló su carrera como hizo con su hijo. Lewis inició el incipiente modelo de coger a un chaval tierno del ‘karting’ para llevarle hasta la Fórmula 1. McLaren se encargó de todo desde ese momento.
El holandés, contra todo pronóstico, necesitó más tiempo para adaptarse con los monoplazas. Empezó en la Fórmula Renault (Verstappen, directamente, en la Fórmula 3). El primer año terminó quinto en el campeonato, aunque necesitó tres para conseguir el título. En McLaren tuvieron paciencia. En 2015 subió a las World Series (que ganó Sainz), pero acabó tercero. De Vries mostró grandes destellos de talento, pero no reprodujo el esquema de pilotos como Hulkenberg, Russell o Norris, que ganaron el campeonato en el que debutaron cada año. Lando, por ejemplo, venció en la Fórmula Renault a la primera.
Norris y Verstappen entran en juego
De Vries necesitó otros tres años para lograr el título en la Fórmula 2. En 2018, Albon y Norris le batieron con menor experiencia en monoplazas. Dos nombres que se cruzaron en su camino. Pero Lando entró directamente en McLaren de la mano de Zak Brown. El piloto de McLaren asombró en el concurso invernal de los Autosport BRDC Awards, que nominó a la mejor promesa británica. Los ingenieros de la escudería británico formaron parte del jurado, y le ‘soplaron’ a Brown el talento del joven piloto que analizaron junto a otras jóvenes promesas. Hasta la Fórmula 3, el entorno de Norris no se había casado con nadie. Pero como Helmut Marko con Verstappen, Brown le abrió el camino hacia la Fórmula 1 si mantenía semejante nivel de rendimiento. La suerte de Nick de Vries estaba sentenciada en McLaren.
Tan dura o más como la suerte de McLaren fue la llegada meteórica de Max Verstappen a la Fórmula 1, que eclipsó a De Vries. Holanda es un país pequeño en términos automovilísticos y, literalmente, se volvió loco con el talento y la personalidad de Verstappen hijo, apellido también archiconocido en el país. De Vries logró el título de la Fórmula 2 en 2019, pero no fue suficiente para dar el salto a la Fórmula 1.
Hamilton, de nuevo por el camino
Fritz Van Eerd es uno de los grandes millonarios holandeses y apasionado del automovilismo. CEO y propietario junto con su familia de la cadena de supermercados Jumbo se volcó con el patrocinio personal a Verstappen, como otras empresas holandesas. Piloto amateur en el Campeonato del Mundo de Resistencia, Van Eerd montó un equipo propio (Team Nederland) con pilotos neerlandeses, entre ellos De Vries. En Le Mans y en el campeonato brilló extraordinariamente, hasta el punto de que Toyota ha puesto sus ojos en el joven piloto. Y podría ser parte del equipo nipón en el futuro. Aunque fue más modesto el apoyo, De Vries lleva una pequeña pegatina de Jumbo en su casco.
De Vries tuvo que buscarse la vida fuera de McLaren en 2019. Con su título de Formula 2 en el bolsillo -los títulos llegaban, pero siempre tarde- Toto Wolff entró en juego y lo introdujo en la órbita de Mercedes. Le colocó en el equipo de la Formula E, junto con Stoffel Vandoorme. Ganó el título en 2021. Hoy, Wolff gestiona y su carrera. «Admiré su decisión después de ganar el título de la Fórmula 2 y decir: ‘quiero ser parte de un equipo oficial, y es por lo que me uno al equipo de Mercedes en la Fórmula E, más que perseguir el sueño de la Fórmula 1′», declaró Toto Wolff tras su triunfo el pasado año. «Ahora ha llegado el momento de reconocer su talento y habilidad, así que hay conversaciones (sobre la Fórmula 1)», explicó cuando los rumores le situaban como candidato a Williams. «Para nosotros, lo más importante es que siga en la familia. No quiero perderle por otro campeonato de la Fórmula E, pero no le bloquearía en su camino a la Fórmula 1». De hecho, lo ha impulsado.
Su nombre incluso sonó durante el invierno como posible sustituto de Lewis Hamilto, en caso de que el británico hubiera dado la espantada a final de la pasada temporada. Años después de que Ron Dennis y Martin Whitmarsh pensaran que Nick podría ser el heredero de Lewis, es Toto Wolff (con el piloto británico en sus filas) quien está detrás de su participación con Williams en el Gran Premio de España. Y si el austríaco se lo propone, quizás Nick de Vries, el holandés tapado, debute en 2023 en la Fórmula 1.
Fuente: https://www.elconfidencial.com/deportes/formula-1/2022-05-19/mclaren-mercedes-ron-dennis-verstappen-norris-de-vries_3426962/