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Apameh Schönauer, residente en Berlín, es el nombre de la nueva reina del país centroeuropeo, tras ser coronada el sábado.
Esta arquitecta de 39 años nacida en Teherán y madre de dos hijos se coronó el sábado como la mujer más hermosa de Alemania durante el concurso que se celebró en Europa Park, un reciento ubicado en la localidad de Rust, al suroeste del país centroeuropeo. La flamante vencedora, que se impuso a sus ocho competidoras en la final de este concurso, se embolsará un premio de 25.000 euros.
En el certamen Miss Alemania 2024, Schönauer anunció su compromiso con los derechos de las mujeres,especialmente en Irán. «Creo que Alemania necesita abrir los brazos un poco más y permitirnos ser más coloridas».
Su objetivo pasa por «ayudar a las mujeres jóvenes a realizar sus sueños» y al mismo tiempo pidió a las mujeres de origen inmigrante que se integren en lasociedad de acogida preservando su cultura: «Siempre celebro la Navidad y el Año Nuevo iraní».
Schoenaer, activista y fundadora de una organización que defiende a las mujeres oprimidas, destacó que tiene la intención de aprovechar la oportunidad y apoyar firmemente a las mujeres en todos los ámbitos de la vida, para mostrar «la fuerza inquebrantable que hay dentro de cada una de nosotras».
Nació en Teherán, la capital de Irán, y huyó de Irán con su familia cuando tenía 6 años. «Fuimos a Alemania para que mi hermana y yo pudiéramos vivir en libertad. No fue un camino fácil», recalcó.
Un jurado compuesto por seis miembros, entre ellos Vivian Wolfe (escritora) y Sharon Batiste (actriz), fue el encargado de elegir a Miss Alemania. Según los organizadores, 15.000 mujeres solicitaron participar en este concurso. El certamen, que originalmente se celebraba como un concurso de belleza, ha cambiado fundamentalmente desde 2019 y se han revisado sus reglamentos.
Según los organizadores, los ganadores de estos concursos ya no son juzgados por su apariencia, sino por su personalidad, compromiso individual, creatividad o sus vidas. Tamara Schwab, de Baviera, fue una de las participantes que desde hace dos años y medio vive con un corazón donado. Kristina Medrjewski, de Dinslaken, otra participante en el concurso, padece una rara enfermedad autoinmune y tiene que utilizar una silla de ruedas debido a la inmovilidad de sus extremidades.
«Creo que es muy bueno que la competencia haya cambiado tanto», dijo Lisa Pauss, ministra de Familia de los Verdes en Alemania, en un mensaje de vídeo. Hoy en día, en lugar de una imagen unilateral de las mujeres, vemos una visión de la vida de las personas«, prosiguió.
«No es un concurso bonito en absoluto», dijo Kira Geiss, activista religiosa y fundadora de una asociación juvenil en la ciudad de Magdeburgo, que fue Miss Alemania el año pasado. Entre los cambios aplicados en el concurso está que se elimina el límite de edad de 39 años y pueden participar todas las mujeres mayores de 18 años. El ganador ya no recibe corona y su vestido está decorado sólo con una cinta.