#PorSoleares. Con Claudia y Julio el oficialismo, con Adán y Nacho mosaico de clases… Violencia de genero contra Sandra Izcoa
Por Jesús Manuel Hernández
El acto del sábado 10 de junio en Tecamachalco se quedará en las mente de los analistas y operadores políticos. Habrá quien dude si fueron 35 mil personas o menos, quizá ese dato sea el menos trascendente, lo interesante, lo digno de poner en relieve es la capacidad organizativa de reunir a poblanos de chile, de dulce y de manteca, es decir de todas las clases sociales y políticas lo que significa un mosaico envidiable.
No puede uno menos que comparar el acto de apoyo a “Claudia” con el ofrecido a “Adán”.
En el primero el sello de la casa, el oficialismo, la burocracia en pleno ofrecida a la corcholata.
En el segundo, la mezcla de intereses económicos con las fuerzas vivas de las clases -no de una clase- políticas del Estado.
Las imágenes recordaron aquél 24 de Mayo de 1998 cuando se decidía la candidatura para suceder a Manuel Bartlett. Melquíades Morales y José Luis Flores presentaron a la sociedad sus fuerzas, el primero dejó ver la comunidad formada en años, el segundo se ofreció a la capacidad oficial de organizar la marcha.
Muchas anécdotas podrían contarse derivadas de ese momento, donde la idea de la “traición” cruzó la mente de alguno de los protagonistas.
Pero este 10 de junio Ignacio -Nacho- Mier mostró que tiene muy bien aprendida la lección de formar cuadros desde abajo, en medio y arriba.
Por demás está citar que “Claudia” nunca ofreció su apoyo a Julio Huerta para la gubernatura y que el sábado, Adán Augusto, habló del “hombre del futuro”, lo que dejó en claro el proyecto para el diputado, por lo menos escuchado por el Secretario de Gobernación de boca de su jefe, amigo y hermano.
¿Y dónde queda Alejandro Armenta Mier? Esa es una buena pregunta, ¿será la carta escondida en Casa Aguayo para impedir que Nacho Mier consolide sus planes?
¿O acaso no ha pensado nadie que la fuerza de Armenta sumada a la del gobierno pudieran estar unidas en los túneles, en los subterráneos de la política poblana?
Hay temas, reuniones, patrocinios inconfesables que dejan abiertas varias líneas de investigación.
Por lo pronto el respetable abucheó, lanzó cojines, pidió que le devuelvan las entradas a Julio Huerta y sus operadores respecto a la contratación de Sandra Izcoa, expuesta a “sotto voce” y ventilada muy en corto desde el domingo 4 de junio y luego soltada con el permiso del “Julio”.
La intención, dicen, era buena, cooptar a una persona con buenas relaciones entre la sociedad poblana, donde Julio no tiene cabida, salvo por el cargo desempeñado, y segundo se anotaría un golpe al grupo de Fernando Manzanilla y algunos panistas identificados con Izcoa.
Pero no fue así, el respetable se molestó por la improvisada faena y ausencia de prospectiva en la decisión.
¿Acaso no consideraron las repercusiones de contratar a la persona más identificada con Martha Érika Hidalgo?
¿Nadie le dijo al Secretario de Gobernación los pros y los contras?
El mismo Julio Huerta tomó la decisión de llamarle y ante la crítica y los abucheos, simplemente se desentendió del tema.
Dicho de otra forma la primera víctima de violencia contra la mujer, de la mano de Julio Huerta está a la vista de todos.
O por lo menos, así me lo parece.